El futuro está hecho de audacia

Me llamo Angelita Rebollo García y nací en Espina de Tremor, pueblo de la comarca de El Bierzo. Mi andadura profesional como investigadora en el mundo del cáncer me hizo salir de León muy pronto para continuar mi carrera en varios países. Aunque hace muchos años que vivo en el extranjero, mantengo vínculos constantes con León, ciudad a la que vuelvo con frecuencia, pero en la que no sería fácil seguir desarrollando mi actividad científica.

La visión que tengo de la ciudad de León de hace treinta años es bien distinta a lo que veo cada vez que vuelvo. Recuerdo el tejido industrial de la época, con compañías como Antibióticos, la azucarera, la vidriera, Laboratorios Ovejero, Laboratorios Syva, Abelló, León Farma y cuencas mineras entre lo que yo recuerde. De todo eso poco ha sobrevivido al tiempo. Quizá destacar Laboratorios Ovejero y Laboratorios Syva. Bajo mi punto de vista, la ciudad se ha empobrecido debido a la falta de visión de futuro de sus dirigentes y la ausencia de inversión en áreas clave como la investigación y desarrollo.

Como científica me entristece ver que la inversión de mi país —y de la ciudad y la provincia de León— en I+D es de las más bajas de todos los países de Europa. Invertir en I+D es invertir en futuro, incluso si estas inversiones no son rentables a corto plazo. Me gustaría que los políticos de la provincia y de la comunidad autónoma tuvieran una visión de futuro y largas miras para darse cuenta de que esas inversiones generan riqueza, que la colaboración publico-privado beneficia a todos.

El Parque Tecnológico de León se inauguro en el año 2008 y trece años mas tarde sólo cuenta con ocho empresas instaladas en el recinto. ¿Qué esta pasando? En mi opinión, León se ha convertido en una ciudad de servicios, que no atrae a gente con ganas de emprender, quizá por las trabas burocráticas y la poca ayuda. Se necesita modernizar y dinamizar la economía y favorecer la creación de nuevas empresas que ayuden a la reindustrialización provincial.

Se puede impulsar el desarrollo a través del turismo, de la tecnología, la revolución digital, con una productividad alta y de calidad, invirtiendo en capital humano, en investigación, creando empleos sostenibles, mirando hacia la transición energética y fortaleciendo la educación.

Los métodos y abordajes para impulsar la economía que ayer valían, hoy estarán desfasados y mañana serán probablemente obsoletos. De ahí la importancia de innovar y de invertir en investigación y desarrollo. Sin cambio no hay crecimiento y sin crecimiento no hay mejora ni desarrollo. León es una ciudad con potencial y tenemos que explotarlo, como están haciendo ya otras provincias de la comunidad de Castilla y León.

León sufre de una baja tasa de inversión, tanto pública como privada y tanto nacional como extranjera. ¿Cuántas sociedades extranjeras están establecidas en León? ¿Cuántos acuerdos bilaterales de inversión se han hecho en León? Hay sectores con un potencial importante como el tecnológico, el de la biotecnología, turismo, industria farmacéutica e industria veterinaria. Tenemos dos importantes referencias en el sector de medicamentos para animales. Potenciemos, pues, esta industria.

Los grupos industriales Antolín, Campofrío, GSK, Nissan Motor, Iveco, Michelin, Renault, etcétera, no se han instalado en León, sino en otras provincias de la comunidad. León sólo tienen microempresas. Estas grandes compañías generan ingresos y participan a la creación de un gran tejido industrial y mucho empleo. ¿Cuánto facturan estas industrias comparadas con las que existen en León? ¿Por qué decidieron instalarse en otra provincia de la comunidad y no en León? ¿Mejores ventajas? Seguro que alguien tiene la respuesta a estas preguntas. Y tengo más interrogantes: ¿cuántas empresas se han creado en León a partir de patentes, de propiedad industrial-intelectual o de proyectos de investigación realizados por la universidad? ¿Qué hace León para retener el talento joven? Espero que todas estas preguntas generen al menos una reflexión sobre qué es lo que queremos para la provincia de León.

Señores políticos: nunca llegaremos a ser competitivos siendo mediocres e ignorando que la innovación es clave para impulsar el crecimiento dinámico de una economía sólida. No les estoy contando nada nuevo si les digo que hay que potenciar la creatividad y el talento de las nuevas generaciones. Señores políticos: el futuro esta hecho de audacia y de espíritu de innovación y para eso hay que asumir riesgos.