Abarth 695. La ‘picadura’ del Escorpión
JAVIER FERNÁNDEZ
Inspiración… aerodinámica. El septuagésimo aniversario de la fundación de ‘Abarth & C.’, cuajado de guiños al genio ‘transformista’ (de las ‘marmitas’ de escape a coches completos) que fuese Carlo Alberto Abarth (1908 — 1979), lo sustancia la compañía en 1.949 unidades de un exclusivista 695 que se convierte en una de las más sugestivas ‘preparaciones’ que haya lanzado nunca la marca del Escorpión (signo zodiacal de Carlo).
Una ‘picadura’ que Abarth propone en clave aerodinámica: el nuevo alerón zaguero ‘Spoiler ad Assetto Variable’, resultado de los trabajos llevados a cabo en el túnel de viento —a escala real— que Fiat tiene en Orbassano, en las inmediaciones de la casa madre turinesa, capaz de maximizar, no sólo las prestaciones aerodinámicas del coche, también de aumentar el agarre en trazados mixto-rápidos y, lógicamente, la estabilidad a altas velocidades.
El innovador ‘spoiler’ resulta ser todo un homenaje al concepto de prestaciones profusamente utilizado por el fundador; mucho más allá de la búsqueda de la potencia pura, la velocidad máxima y la aceleración, Carlo se propuso desarrollar —y bien que lo consiguiera— innovadoras soluciones técnicas en su momento. Así que, lo que comenzó con ‘el invento’ de levantar el capó trasero de los Cinquecento, para refrigerar el motor y ‘asentar’ el tren zaguero, ha acabado por convertirse en toda una seña de identidad en el Abarth 695 ‘70 Aniversario’, destinado tanto a coleccionistas como a los entusiastas de las prestaciones y la deportividad… «sin compromiso»: impresionante alerón zaguero que rinde culto —referencia directa— al mundo de las carreras y la legendaria historia ‘racing’ del Escorpión.
Un generoso alerón, que remata la luneta y puede ajustarse manualmente en su inclinación (como en las carreras), para permitir al ‘piloto’ adecuar el comportamiento dinámico del coche en función del trazado y de su forma de conducir: 12 posiciones, con una inclinación de hasta 60º.
Consecuencia: en posición de máxima inclinación (60º), el alerón aumenta la carga aerodinámica hasta 42 kilos a 200 por hora de velocidad, lo que optimiza la estabilidad en superficies mixtas rápidas.
Para los amantes de las curiosidades: en el legendario trazado transalpino de Vallelunga, el ‘spoiler’ ha permito al conductor reducir en un 40% las correcciones de la dirección.
La ‘caracterización estética’ del Abarth 695 «70» viene dada por algunos emblemáticos elementos del pasado y del presente: la inconfundible musicalidad del escape activo ‘Record Monza’, la tonalidad ‘Verde Monza 1958’ (homenaje al color del primer 500 Abarth que firmó 6 récords de velocidad en Monza), infinidad de detalles ‘Gris Campovolo’ (incluido el ‘spoiler’), el ‘kit’ de carrocería (como siempre en Abarth), los faldones delantero y trasero, y las carcasas de los retrovisores; color que también se aplica en los adhesivos del Escorpión sobre el capó y en el ‘ajedrezado’ del techo. Monta llantas ‘SuperSport’ de 17 pulgadas, con las célebres pinzas Brembo rojas de aluminio (de 4 pistones las delanteras, en discos autoventilados).
Estilismo ‘racing’ que se traslada a un interior en el que destacan los asientos anatómicos ‘Sabelt Tricolore’, específicos para esta versión, mientras el glorioso pasado deportivo de la marca lo plasma el 695 «70» en el diseño ‘vintage’ del emblema y en la placa numerada —dentro del habitáculo— que da fe de cada una de las 1.949 unidades de esta serie especial.
Y para redondear… el motor más potente de la gama: 180 CV en el tetracilíndrico turboalimentado de 1.4 litros, capaz de ‘sprintar’ de cero a cien en sólo 6,7 segundos y alcanzar una punta de 225 por hora.