La belleza canina desfila en León
Zalomes Biforis, un Epagneul papillón, se erige como mejor ejemplar absoluto de la XXIII Exposición Internacional Canina en la que participaron 600 perros
Una pareja inseparable. FERNANDO OTERO
Hilda es rubia, sedosa y se deja atusar por su handler como si hubiera nacido para ello. Es un akita americano, raza de origen japonés que llegó a Estados Unidos de la mano de soldados después de la II Guerra Mundial. Nadie diría que en tiempos pasados a los ancestros de perra tan zen les usaron para peleas e incluso para cazar osos.
Llegada desde Salamanca, desfiló, con gran apoyo desde la grada, en el quinto grupo de la XXIII Exposición Internacional Canina que se celebró ayer en el Palacio de Exposiciones. Por la pasarela desfilaron casi 600 perros de 140 razas. Y se erigió como mejor ejemplar absoluto uno de los más pequeños. Zalomes Biforis, un Epagneul papillón, que viajó desde Galicia fue el triunfador absoluto del concurso.
El Wolfspitz, con su característica melena leonina y de nombre Mansun Diana se llevó el premio al mejor cachorro para su tierra natal, Burgos. Un Golden Retriever, Costa Artabralury, de La Coruña, se convirtió en el mejor joven del campeonato. Por último, una perra mastín leonés de Villablino, Rosa de la Filtrosa, conquistó al jurado para llevarse el premio al mejor ejemplar de Razas Españolas.
Majestuosos ejemplares como un galgo afgano, contundentes sanbernardos, caniches que extasiaban de elegancia y los más pequeñines chihuahuas de pelo corto deslumbraron al público.
El certamen de León se refrendó ayer como uno de los más importantes dentro de los concursos de belleza canina. Las medallas conseguidas sirven para los certámenes internacionales.