Macroeconomía
La deuda pública da un respiro en julio, pero sigue por encima del 120% del PIB
Baja a los 1,41 billones rompiendo la tendencia al alza de los últimos dos meses, según el Banco de España
En julio las cuentas públicas se dieron un ligero respiro, aunque la deuda pública sigue en niveles nunca antes vistos. El endeudamiento de las administraciones públicas alcanzó los 1,41 billones de euros, lo que supone un 0,6% menos que en junio y se rompe así la tendencia alcista de los últimos dos meses.
Los datos publicados este viernes por el Banco de España revelan que la deuda pública sigue por encima del 120% del PIB a pesar de que el objetivo comprometido por el Gobierno con Bruselas para todo el año es del 119,5%.
Son 126.000 millones más que en julio del año pasado, casi un 10% de incremento, debido al aumento de gastos y el recorte de ingresos para financiar las medidas de apoyo a la covid desde que estalló la crisis.
Además, si se compara con el mismo mes de 2019, antes de la pandemia, la deuda pública se ha elevado en nada menos que 223.000 millones de euros.
Todas las administraciones han reducido en julio su endeudamiento, a excepción de la Seguridad Social. La más voluminosa, la deuda del Estado, que es quien además ha asumido el impacto de la crisis en mayor medida, se situó en julio en 1,22 billones de euros, unos 10.500 millones menos que en junio. A pesar de este descenso, supone un 6% más que en el mismo mes de 2020.
Las comunidades autónomas redujeron su pasivo un 0,5% respecto a junio, hasta los 311.000 millones de euros. Es casi un 3% más que el volumen de deuda que presentaban hace un año. Y los ayuntamientos también consiguieron recortarla en un 1% respecto a junio, hasta los 22.400 millones.
En cambio, respecto a julio de 2020 su pasivo ha aumentado un 10%.
La Seguridad Social no consiguió recortar su endeudamiento en el mes de julio, y se mantuvo estable en los casi 92.000 millones de euros.
Además, respecto a hace un año la deuda de la Seguridad Social se ha disparado un 33% por los préstamos concedidos por el Estado para financiar su déficit presupuestario.
Y es que la pandemia ha supuesto el mayor aumento de la deuda pública en la historia de España. Después de unos años de lenta reducción hasta conseguir acabar 2019 por debajo del 100% del PIB (concretamente en el 95,5%), la crisis del coronavirus echó por los aires todos los esfuerzos e incrementó el pasivo de las administraciones públicas en 24,4 puntos porcentuales en 2020, hasta cerrar el año pasado en el 119,9% del PIB.