En defensa de la alubia
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Un grupo de investigación compuesto por empresas, una cooperativa y el Instituto de Biotecnología de León ha probado un nuevo tratamiento alternativo a los fitosanitarios que ha tenido muy buenos resultados tanto en los cultivos de leguminosas como en los de lúpulo.
Así lo ha explicado el ingeniero industrial Eduardo Pérez en una jornada de desarrollo y validación de compuestos naturales para el control de enfermedades en cultivos que se ha celebrado este miércoles en la cooperativa de Lar en Veguellina de Órbigo.
La Unión Europea es cada vez más restrictiva en el uso de productos químicos en el campo y hay muchos compuestos que ya no se pueden utilizar como los fitosanitarios, ha explicado.
Por eso ha insistido en que es necesario buscar alternativas como este nuevo tratamiento cuya principal ventaja es que es más soluble y penetra mejor en la planta, y ha recalcado que se ha probado en leguminosas y en lúpulo con muy buenos resultados.
«En el caso de las alubias comprobamos que la planta crecía con más vigor», ha especificado el ingeniero.
En la jornada participan miembros del grupo operativo que expondrá su trabajo dentro del proyecto, y ha contado representación de la Dirección General de Industrialización y Modernización Agraria de la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León.
Agroinnova Go CyL es un consorcio creado con el objetivo de optimizar los procesos de control de enfermedades de los cultivos del lúpulo y las leguminosas reduciendo su efecto sobre el medioambiente y la salud humana y animal, mediante la investigación, el desarrollo y las pruebas en campo.
Este proyecto se ha podido desarrollar gracias a la cofinanciación de la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León y la Unión Europea a través de los Fondos FEADER.
El estudio ha participado en las ayudas de la Submedida 16.1, Apoyo para la creación y el funcionamiento de Grupos Operativos de la AIE en materia de productividad y sostenibilidad agrícola.
El proyecto lleva a cabo el desarrollo y validación de innovadores compuestos basados en sustancias naturales biodegradables con actividades antifúngicas, así como la verificación de su empleo en el control e inhibición de los agentes patógenos causantes de las enfermedades de mayor incidencia que afectan a dos de los principales cultivos de la región.