La hoja de ruta de la futura reina Leonor

Leonor supo del destino que la vida le había asignado desde bien pequeña. A través de libros y de historias, su madre le hizo ver que no era una niña más. También a su hermana Sofía. Su infancia transcurrió sin apenas exposición pública, con dos posados al año, en navidades y verano, para mantener su privacidad, para que pudieran disfrutar de una infancia lo más normal posible. Pero en su adolescencia, con su cambio de rol, con su padre ya en el trono y ella convertida en princesa de Asturias desde 2014, su presencia pública se multiplicó. Y esto solo es el principio. Leonor cumple hoy 17 años, con su papel institucional interiorizado y cursando segundo de Bachillerato en el UWC Atlantic College de Gales. La princesa de Asturias acaba de concluir un fin de semana en el que ha sido la auténtica protagonista. En la ceremonia del Teatro Campoamor de Oviedo, que los premiados eran para ella y su hermana espejos en los que reflejarse. Pero sabe, porque así se lo han inculcado y porque así lo exteriorizó la reina Letizia en una ocasión ante la pregunta de una espontánea, que una vez concluidos sus estudios en Gales hará lo que debe por encima de lo que querría hacer. La formación de la heredera al trono, si bien no es un calco, sí sigue el patrón que en su día se fijó con su padre. La fecha del 31 de octubre de 2023 está marcada en rojo en Zarzuela, pero también en Moncloa. Leonor alcanzará ese día la mayoría de edad. Don Felipe cumplió los 18 jurando la Constitución en el Parlamento. El calendario electoral determinará esa fecha para la princesa Leonor, porque a finales de octubre del próximo año es posible que las cámaras ya estén disueltas y los españoles convocados a las urnas. Y en tal circunstancia no puede llevarse a cabo el juramento. Salvo que Pedro Sánchez no pulse el botón electoral hasta noviembre —en el segundo semestre del año a España le corresponde la presidencia europea— o que la jura de la Carta Magna se posponga hasta que haya un nuevo gobierno, ya en 2024.

La hoja de ruta prevista pasa por estudiar una carrera superior, probablemente Derecho, después de cumplir otra obligación. Como la Constitución atribuye al jefe del Estado el mando supremo de las Fuerzas Armadas, es del todo lógico que quien está destinada a ocupar el cargo de capitana general del Ejército de Tierra, de la Armada y del Ejército del Aire y del Espacio reciba algún tipo de formación militar. En 2014, el ministro de Defensa, Pedro Morenés, dijo que la princesa Leonor cursaría estudios en las academias militares, como su padre. Y lo hará en las tres academias de los ejércitos: la del Aire en San Javier, en la Región de Murcia; la de Tierra en Zaragoza y la de la Armada en Marín, en Pontevedra. Actualmente, en Europa cinco mujeres, Victoria de Suecia, Isabel de los belgas, Amalia de los Países Bajos, Ingrid de Noruega y Leonor de España, están a un paso del trono. Y todas ellas —salvo la princesa holandesa y Leonor, que es la única que no ha alcanzado la mayoría de edad— han recibido formación militar.