Iglesia evangélica, una casa abierta a todos
georgino fernández | león
Huyeron de ese concepto de iglesia sacrosanta que empequeñece a los fieles. Su idea era levantar un templo moderno, acogedor, accesible, cómodo y cercano. «Es una iglesia concebida como la casa de todos», explica el Pastor Emérito, Manuel Corral. Y así lo hicieron. En la Avenida Peregrinos 38 tiene ya su sitio la sede social y de culto de la primera Iglesia Evangélica en León tras siete años de obras.
El edificio, diseñado por el Estudio de Liébana Arquitectos, se construye en una parcela de más de 5000 metros cuadrados, y ocupa 3000 metros de edificación, moderna y vanguardista. Es el edificio singular dedicado al culto evangélico mayor del sur de Europa. Es un edificio significativo que expresa la fe públicamente, y donde todo el mundo puede ver lo que se realiza dentro. De hecho, ese concepto de transparencia ha sido otra de las directrices como apunta también Corral. Es un proyecto de hormigón blanco, en muro cortina abierto por el centro, con el propósito de separar las funciones, la Capilla y la Sede social y administración. Y está unido por un gran vestíbulo para que la convivencia fluya hacía el exterior.
Todo el conjunto es penetrado por todos los sitios, las ventanas exteriores y el corte central, con dos puertas de acceso directo desde la calle. «Con grandes cristaleras -explica- ya que no somos una congregación cerrada, ni secreta, ni exclusiva. Todo el visitante encuentra un acceso directo y libre desde la calle».
Se ha pretendido además separar la propiedad de la vía pública sin impedir ver el edificio, dado que está enclavado en una vía rápida (ronda interior) y se ha jugado con un argumento vegetal a modo de juncos, que no impide ver a los conductores, este singular Templo Protestante.
sala de lactancia
Un capítulo que destaca es el de equipamiento. Tiene cocina, biblioteca, diferentes aulas de enseñanza para niños y mayores, guardería y algo muy novedoso: una sala de lactancia para que las mamás puedan seguir el culto alimentado a sus bebés. Y oficinas para la administración de la iglesia y Seminario.
La lista se completa con modernos equipos de grabación para audio y televisión así como dos cabinas de traducción simultánea. El auditorio principal cuenta con piano de cola y los instrumentos de música para los cultos dominicales. Cuenta con un gran videowall en el frente para seguir la letra de los himnos y contenido de los sermones. La acústica es de muy buena calidad, dado que las paredes están forradas de corcho. Los pasillos están iluminados por led, a modo de lágrimas. Es un edificio sostenible, con mucha luz solar que ayuda a ahorrar en gastos de iluminación. «Todos los recursos humanos y de materiales —dice Corral— hemos tratado que sean de León, así como la mayoría de los materiales. La decoración ha estado a cargo de la leonesa Paula Revilla y la empresa Becedas ha provisto todo el equipamiento».
Aunque el único símbolo religioso que hay, es la gran Cruz iluminada en la fachada principal se ha realizado un guiño a la “Pulcra Leonina”, con las 12 vidrieras que rodean la Cruz.