Diario de León

Más necesarios que nunca

La capacidad de reacción de los graduados sociales, con Leonardo Olivares al frente

Leonardo Olivares, presidente del Colegio de Graduados Sociales, en la sede de la entidad. MARCIANO PÉREZ

Leonardo Olivares, presidente del Colegio de Graduados Sociales, en la sede de la entidad. MARCIANO PÉREZ

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En los momentos más complicados de la historia laboral de nuestro país, se ha reconocido públicamente la figura del Graduado Social como necesaria e imprescindible en la resolución de las situaciones generadas como consecuencia de la pandemia.

«Desde el minuto cero del primer decreto del estado de alarma, y no sin realizar las gestiones oportunas a nivel del Ministerio de Trabajo, fuimos incorporados como profesionales necesarios para el funcionamiento laboral y administrativo, no siendo obligados a suspender nuestras actividades. Y así, los Graduados Sociales de nuestra provincia, como del resto de España, empezamos a ejercer una labor maratoniana para dar solución a los cientos de trabajadores que se tenían que incorporar a los Ertes y a las empresas, que se veían en la obligación de cerrar sus instalaciones y necesitaban algún tipo de ayuda económica. Los Graduados Sociales hemos tramitado el 80% de los Ertes que se han presentado, y lo hemos hecho con la profesionalidad que siempre nos ha caracterizado, puesto que es una seña de identidad tanto el buen asesoramiento, como el buen acompañamiento al empresario y al trabajador en la resolución de conflictos», detalla en este sentido Leonardo Olivares Lobato, Presidente del Excmo. Colegio Oficial de Graduados Sociales de León y Vocal del Consejo General de Colegios Oficiales de Graduados Sociales de España. En cuanto a los profesionales del sector en León, Olivares Lobato explica que «todo esto llego en un año, que mejor olvidar, pero que para el Colegio de Graduados Sociales era muy importante, pues celebrábamos nuestro 50 aniversario, y aunque es una cifra alta, somos un Colegio joven, formado por unos 250 colegiados, entre ejercientes y no ejercientes, profesionales ilusionados con su trabajo y dedicados en cuerpo y alma a dar soluciones», afirma.

Olivares explica, asimismo, que todo el trabajo de los colegiados debe estar respaldado por una entidad como es el Colegio, puesto que da una mayor seguridad y garantía social. En estos momentos, el Colegio, que se ha visto en la obligación de suspender conferencias, cursos y formación en general, actividades habituales dentro del mismo, ha reforzado la interacción con sus colegiados manteniéndolos informados de aquellas novedades legislativas, así como criterios de interpretación de las mismas. «Además, y a pesar de la pandemia, y tras muchas reuniones, se han firmado acuerdos con el Sepe, con la Dirección General de Tráfico, con la Junta de Castilla y León, acuerdos con el objetivo de mejorar las relaciones con estas y otras administraciones públicas, así como para facilitar nuestro trabajo diario», especifica el presidente.

El presidente del Colegio no quiere pasar por alto la situación sufrida por los profesionales como consecuencia de la ausencia total de actividad de la administración pública, en los primeros meses de la pandemia y los cambios de actitud de la misma a partir de esos momentos: «Oficinas cerradas, citas imposibles, teléfonos que no descuelgan, y que ha derivado en la obligación a realizar gestiones en nuestros despachos, propias de la administración y que además han sido criticadas. Es deseo del presidente del Colegio de Graduados Sociales que este año mejoren las relaciones con la administración y vuelvan a ser de colaboración en ambos sentidos», señala al respecto como representante del colectivo.

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