Plan para que los propietarios vivan tranquilos
Los administradores de fincas diseñan una estrategia para aumentar la calidad de la gestión
Jesús Luque Borge.
Una buena administración reduce gastos y quebraderos de cabeza a los propietarios. Los administradores de fincas preparan un plan estratégico nacional para dar mayor calidad al servicio que ofrecen a las comunidades de propietarios. Uno de los retos es utilizar las nuevas tecnologías para calcular con mayor precisión los gastos de consumos de los edificios. «Una buena gestión ahorra mucho dinero y, sobre todo, evita problemas a los propietarios», destaca Jesús Luque Borge, el presidente del Consejo de Colegios de Administradores de Fincas de Castilla y León, que cuenta con 90 colegiados en León. Borge alerta a los propietarios del gran intrusismo existente en el sector. «En el colegio están disponible los nombres de los 90 colegiados que ofrecen un servicio profesional a los que el colegio da formación y están protegidos por el seguro de responsabilidad civil. El profesional colegiado sabe lo que se hace». Y lo que hacen los administradores de fincas es ahorrar dinero a los propietarios y ofrecer la mayor garantía frente a terceros.
La exigencia colegial de ofrecer una mayor calidad tiene ocupado al colectivo, que se autoexamina para mejorar la atención. Los administradores de fincas son expertos en la gestión de la rehabilitación de edificios, eliminación de barreras arquitectónicas, eficiencia energética, domótica y, lo que más preocupa a los propietarios, la tramitación de las subvenciones y la relación con Hacienda en el cumplimento de las obligaciones fiscales de las comunidades de propietarios.
El colegio tuvo el sábado una jornada formativa para administradores de fincas, que actualizaron conocimientos sobre autoconsumo eléctrico e instalaciones de punto de carga para coches eléctricos. Al curso asistieron treinta colegiados.