
La reina Letizia reivindicó ayer, con motivo del acto conmemorativo del Día mundial de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, el trabajo «acreditado y esforzado» de la organización humanitaria, y mostró su reconocimiento y agradecimiento a las personas y entidades que «nos enseñan cómo ser mejores». La reina presidió en el Oceanográfic de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia el acto de entrega de las condecoraciones de Cruz Roja 2022, que han recaído en siete personas y entidades de las que ha destacado que «son diversas y tienen una forma de ver el mundo diversa», pero encontró «una manera de escuchar, de crear para transformarnos, de cuidar y atender, de solucionar».
En nombre de los galardonados habló Samar Abou Jaoudeh, quien recogió la placa a la Cruz Roja libanesa y aseguró que es un honor compartir este reconocimiento con personas y organizaciones que tienen los mismos principios y valores y que se dedican a diario a mejorar la vida de las personas desde sus ámbitos.
Explicó que es voluntaria de Cruz Roja desde los 16 años y ha aprendido unos principios fundamentales que se han convertido en una forma de vivir que se refleja en todos los voluntarios que trabajan en el campo humanitario, a quienes ha agradecido el tiempo que dedican a apoyar y a vivir «el dolor y la alegría, lo bueno y lo malo», con las personas a las que ayudan.
Previamente dirigió unas palabras Therese Jamáa, experta en Tecnología Humanitaria y que ha formado parte de la Cruz Roja en Líbano, en Francia y en España, quien se ha emocionado al recordar el alivio y la esperanza que ha supuesto para los libaneses la ayuda de la Cruz Roja.