el sabor de la carne

Una cocina tradicional con toques de innovación en la que reinan las mejores carnes de la Montaña de Riaño en sus diversos cortes y los famosos embutidos montañeses. Así se podría resumir la esencia de la Parrilla El Molino, un restaurante familiar que inició su andadura hace ya diez años y que ofrece un exquisito menú diario y una amplia carta de platos, entre los que predominan los productos locales de alta calidad.

Todos los miércoles del año, hay cocido montañés y en la oferta figuran una amplia variedad de cachopos, carnes a la brasa y ensaladas, entre otras muchas opciones, incluidas dulces. De hecho, todos los postres son de elaboración propia. Sobresale la consagrada tarta de la abuela que ya se ofrecía en el Hotel Moderno de Riaño, propiedad de los abuelos de la que hoy es la tercera generación de hosteleros.

La excelente relación calidad-precio, el trato familiar sin perder un ápice de profesionalidad y la apuesta sin fisuras por las materias primas de la zona son los pilares que sostienen el éxito de la Parrilla El Molino de Riaño, que también realiza eventos, como bautizos, comuniones y bodas de formato reducido. «Elaboramos menús especiales según las demandadas de los organizadores», explicó la gerencia de este restaurante.

Cachopo de ternera relleno de jamón serrano y queso o de cecina, queso de cabra y mermelada de pimientos; costillas a la brasa, churrasco de ternera, pulpo, zamburiñas, entrecot de buey a la brasa, fabes con matanza de la montaña, ensalada templada de setas y gambas o de perdiz escabechada con manzanas, nueces y mango; canutillos de cecina y foie con mermelada de pimiento asado, hamburguesas, guiso de carrilleras de ibérico, croquetas caseras de boletus. Todo esto ha formado y forma parte de la carta de la Parrilla El Molino de Riaño. El mejor aval es la opinión de sus clientes.