Con todo el sabor a Navidad
A. gil
rEstas fechas son clave. Y lo son para muchas cosas y por muchos motivos. Son momentos de compartir tiempo con los seres queridos y las personas más cercanas. Siempre que el virus que ha transformados nuestras vidas nos deje, toca pasar buenos ratos en familia y rodeados de amigos. Aunque no es obligatorio y existen múltiples formas de disfrute. Cada uno, que lo haga a su manera.
Una de las formas de hacerlo es compartir mesa y mantel. Charlar y hacer confidencias mientras se disfruta de un menú preparado con cariño puede ser una propuesta de lo más apetecible. Y si puede ser con productos de cercanía y de la tierra, mejor.
Junto a estas líneas, un menú navideño cuya elaboración no lleva demasiado tiempo para que, mejor, lo pasemos disfrutando.
Como primera propuesta, una crema caliente de espárragos trigueros con pistachos y lascas de cecina de León, para que tenga sabor a la tierra. Entonamos así el cuerpo para pasar a un segundo plato, un solomillo Wellington, un plato más contundente en el que la carne de ternera es la protagonista. A una buena materia prima le hace poca falta aderezos, pero en esta ocasión, está acompañada de productos también de la despensa leonesa, como los pimientos del Bierzo o las setas para hacerlo un poco más diferente.
Y, para terminar, el toque dulce, que en esta ocasión va acompañado del caramelo por excelencia de León: el ronchito. También la provincia puede presumir de contar con buenos y variados quesos, algunos de los cuales se pueden utilizar para la receta de este postre, en función de las características del producto y el gusto de cada comensal.
Son muchos los productos de León que pueden servirse a la mesa en estas fechas navideñas. Todos de sobrada calidad y que, a buen seguro, dejarán un regusto exquisito en la boca de quien los pruebe. Y numerosos de ellos, además, pueden ir solos, porque ‘visten’ cualquier mesa por si mismos. Los embutidos de León, como el chorizo, la cecina, el salchichón o el queso son un ejemplo. Unos buenos puerros de Sahagún son exquisitos y saludables o unos pimientos del Bierzo que se pueden disfrutar hasta solos, aunque pegan con casi todo. Así son los productos de León, encajan en cualquier lugar y ocasión, por especial que sea.
De los verdes pastos de la provincia se alimenta un ganado cuya carne es de sobra conocida por su sabor y calidad, así que hay opciones para todos los gustos.
En Navidad, a mesa se convierte, desde tiempos ancestrales, en lugar de encuentro con otros. En escenario de largas veladas que, son especiales por su escasez durante el resto del año. Con un menú bien seleccionado y con productos de calidad, el encuentro se puede transformar en algo memorable.