Diario de León

El último bastión de la humanidad

La llegada del ser humano a las islas aceleró los cambios en su biodiversidad, según un estudio realizado en el polen fosilizado en 27 de ellas, incluidas tres canarias

Vista del mar desde la isla de Santa Cruz de Tenerife. RAMÓN DE LA ROCHA

Vista del mar desde la isla de Santa Cruz de Tenerife. RAMÓN DE LA ROCHA

Publicado por
EFE

Creado:

Actualizado:

Están entre las últimas regiones de la Tierra colonizadas por el hombre, pero las islas han padecido de una manera mucho más acelerada los cambios en su biodiversidad como consecuencia de esos asentamientos y de las actividades humanas. Lo ha comprobado un equipo de científicos de numerosos centros de investigación de varios países, entre ellos de varias universidades y centros de investigación españoles, y sus conclusiones se han publicado ayer en la revista Science. Para llegar a esa conclusión, los investigadores han analizado el polen fosilizado de un total de 27 islas de todo el mundo y repartidas por todos los océanos, y entre ellas las de Gran Canaria, Tenerife y La Gomera, en España, y han comprobado que en cada una de ellas los cambios en la cubierta vegetal se acelera desde el momento en que son colonizadas por el hombre.

Pero también que ese proceso de cambios es mucho más rápido en las islas que han sido colonizadas en los últimos 1.500 años que en las que habían sido habitadas por el hombre con anterioridad, en un periodo que abarca los últimos 5.000 años.

En el trabajo han participado investigadores de universidades e instituciones científicas de numerosos países (Reino Unido, Nueva Zelanda, Países Bajos, Noruega, Dinamarca, Suecia o Australia), y entre ellos expertos de las universidades Autónoma de Madrid, Alcalá de Henares, La Laguna (Canarias) o el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales de Cataluña (Creaf) de la Universidad Autónoma de Barcelona y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

La investigadora de la Universidad de La Laguna Lea de Nascimento ha precisado que el estudio ha consistido en comparar los registros paleoecológicos de las islas, que utilizan indicadores sobre la presencia o la actividad de organismos del pasado para reconstruir los ambientes que habitaban en escalas temporales que pueden ir desde décadas hasta miles de años.

tracking