«El turismo es la mayor esperanza de futuro para la cuenca minera»

 

Salir de la carretera del Sil hacia Salentinos es cambiar el negro del carbón por el colorido del otoño y la naturaleza virgen. Nieva en el pueblo al que se accede por una carretera impecable, arreglada con dinero de los Miner para las cuencas mineras. En este pueblo viven desde hace más de dos décadas Natividad Gavela, de Páramo del Sil, y Senén Ordóñez, de Villamartín del Sil. Aquí nacieron y aquí han criado a sus tres hijos. Ahora empiezan a volar.

 

Pero para ellos no son tiempos de salir por el mundo a buscar un nuevo medio de vida.

 

Senén Ordóñez se quedó en el paro hace tres años, cuando cerraron la escuela taller de Villablino donde era monitor de cantería. El proyecto que tenían dormido —rehabilitar una casa que habían comprado y hacer un albergue— empezó a despertar.   «Estamos a los pies del Catoute: en verano viene mucha gente a hacer rutas y en invierno a la nieve», explica Natividad Gavela. La ruta del oso, de Colinas del Campo a Salentinos, y la ruta de los padrados, de Salentinos a Páramo del Sil, son las más frecuentadas. La Mirada Circular las puso en valor.

 

La cercanía de la estación de Leitariegos y el esfuerzo que hace su escuela de esquí —iniciativa privada que funciona desde hace más de 20 años— atraen a la zona a turistas de Galicia a disfrutar de la nieve. «Hay gente que tiene que bajar a Ponferrada a dormir porque no hay bastante alojamiento», explican.

 

Después de un año largo de trámites están a punto de conseguir todos los permisos para abrir su negocio para el que han recibido «ayudas cero a pesar de estar en una cuenca minera», precisa la mujer. «No nos ponen más que trabas», adelanta. Presentó su idea en la oficina de emprendedores del Consejo Comarcal del Bierzo, donde recibió asesoramiento porque «ayudas no tienen».

 

La ayuda familiar, un préstamo y sus propias manos han sido sus aliados en esta empresa basada en el potencial turístico y en los atractivos naturales de la zona. «El turismo es la mayor esperanza de futuro que les queda a las cuencas mineras», afirman. Consideran un error que los planes de reindustrialización no hayan tenido en cuenta este filón y ven en Somiedo (Asturias) un modelo a seguir.