España decreta el estado de alarma

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la declaración del estado de alerta en el país a partir de mañana a causa de la crisis del coronavirus. En una declaración institucional, ante el avance de la pandemia en el país y la petición de comunidades autónomas como Castilla y León, el Ejecutivo pone en marcha medidas excepcionales para intentar frenar los contagios que en las últimas horas se han desbordado.

El presidente insta a los ciudadanos a protegerse al máximo para hacer frente a la expansión de la enfermedad en los espacios públicos, y ha llamado también al atención a los jóvenes, a los que ha instado a contener sus deseos porque son una parte vital de la población para evitar la transmisión a la población más vulnerable. "Su colaboración es imprescindible", ha señalado.

 "Estamos solo en la primera fase" del combate contra la pandemia, y "no cabe descartar" que en la próxima semana los casos de contagio superen los 10.000, ha adelantado.

"Queridos compatriotas", como se ha referido Sánchez a los españoles, "es un deber personal y una responsabilidad colectiva" mantener una disciplina social que contenga la epidemia. 

El estado de alarma permite movilizar "al máximo" los recursos disponibles del Estado para hacer frente a la expansión de los contagios. "Compatriotas, la victoria depende de cada uno de nosotros", ha señalado el presidente. Que ha llamado también a proteger en la medida que cada uno pueda al conjunto de la población. "Disciplina social" es la receta que ha dictado el presidente, en su breve intervención para decretar el estado de alarma en el conjunto del país. 

En España hay a mediodía de hoy 4.209 infectados y 120 muertos. Son 1.205 más que ayer, y el número de fallecidos asciende a 120, 36 más que ayer. A nivel mundial hay 134.443 infectados y 4.997 muertos. El avance de los contagios en las últimas horas ha forzado la declaración del estado de alerta, menos de 24 horas después de que el presidente del Gobierno anunciara las medidas económicas y sanitarias excepcionales para hacer frente a la pandemia. 

En el ordenamiento jurídico español es la Ley Orgánica 4/1981 la que regula los estados de alarma, excepción y sitio. El primero, que aplicará el Gobierno, es el más leve de esas medidas de carácter urgente y extraordinario y que permite al Ejecutivo, entre otras medidas, tomar las decisiones que sean necesarias para garantizar el abastecimiento de alimentos o medicamentos, intervenir fábricas o centros de trabajo así como limitar movimientos de ciudadanos y vehículos.

El artículo 116, 2, de la Constitución establece que el Gobierno puede declarar el estado de alarma, en todo o parte del territorio nacional, cuando se produzcan "catástrofes, calamidades o desgracias públicas, tales como terremotos, inundaciones, incendios urbanos y forestales o accidentes de gran magnitud", pero también, como es el caso actual, cuando haya "crisis sanitarias, tales como epidemias y situaciones de contaminación graves".

La declaración del estado de alarma, que debe llevarse a cabo mediante decreto acordado en Consejo de Ministros, debe determinar, según la citada ley, "el ámbito territorial, la duración y los efectos del estado de alarma, que no podrá exceder de quince días".