La Junta interviene la residencia de Caboalles tras infectarse el personal

La Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León ha asumido la gestión de la residencia de la tercera edad El Roble, de Caboalles de Abajo, después de que cuatro de los siete trabajadores que decidieron el pasado jueves encerrarse de forma voluntaria en el centro dieran positivo en Covid-19. Se trata de la primera residencia intervenida por la administración autonómica en la provincia de León para poner remedio a una situación que ha derivado en que el 96 por ciento de sus residentes estén contagiados por el coronavirus.

Según señaló ayer el alcalde de Villablino, Mario Rivas, se trata de «garantizar la estabilidad de esta residencia, algo que creemos que es necesario debido a la situación tan peculiar» que presenta el centro.

A estos efectos, las Consejerías de Familia e Igualdad de Oportunidades y la de Sanidad aseguraron ayer en un comunicado que han adoptado una serie de medidas de carácter extraordinario, entre ellas, designar a un empleado público para el desempeño de la dirección y coordinación de la actividad asistencial tal y como le faculta la Orden del Gobierno Central. Asimismo, la Fundación El Roble, entidad titular del centro, pondrá a disposición de la nueva dirección todo el personal del centro y los medios materiales necesarios.

En el comunicado la Junta admite «la situación excepcional que vive el centro y la dificultad para dispensar la adecuada atención a los mayores», por lo que la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades procede, de conformidad con lo establecido en el artículo 5 de la Orden SND/275/2020, de 23 de marzo, en relación con la mencionada Orden SND/265/2020, de 19 de marzo y la Orden SND/295/2020, de 26 de marzo, a adoptar varias medidas, «entre ellas requerir a la empresa Eulen S.A. que, de entre el personal del servicio de estancias diurnas que presta sus servicios en los centros dependientes de la Gerencia de Servicios Sociales en la provincia de León, ponga a disposición del centro privado El Roble a trabajadores con la cualificación necesaria para garantizar la atención de las personas residentes». Se trata, asegura la consejería, de «garantizar los cuidados y la atención de nuestros mayores».

Son cinco los trabajadores que entran a formar parte de la plantilla. Con ellos, ya se han organizado los turnos de mañana y tarde para atender a los doce residentes que aún permanecen en el centro y de los cuales sólo uno no está contagiado.

Además, los dos trabajadores de la residencia que no se encuentran contagiados realizarán el turno de noche. El servicio de comidas y de limpiezas se mantendrá como hasta ahora ya que los encargados de realizar el servicio «no han dado positivo», según aclaró el alcalde de Villablino quien matiza que la decisión de intervenir la residencia e ha tomado en consenso con el Ayuntamiento de Villablino y el patronato de la Fundación El Roble unto con la Delegación del Gobierno y las Consejerías de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta.

Por otra parte, y tras las recomendaciones sanitarias los cuatro trabajadores que han dado positivo en los test continuarán la cuarentena en sus domicilios.

Hoy se cumple una semana desde que los siete trabajadores del centro decidieron quedarse encerrados con sus residentes, una iniciativa que surgía de forma voluntaria por cuestiones de «responsabilidad», para no dejar solos a los usuarios en un momento tan complicado y para no poner en riesgo la salud de sus familiares debido a su situación laboral.

El domingo pasado, el Ayuntamiento confirmó que 24 de los 25 residentes habían dado positivo en Covid-19. Trece de ellos tuvieron que ser trasladados al Hospital del Bierzo. Al tiempo, efectivos de la UME se desplazaron a Laciana para realizar labores de desinfección y reforzar los trabajos que se habían llevado a cabo por el Ayuntamiento.

El alcalde manifestó ayer su agradecimiento a los trabajadores por «como han planteado la situación, por cómo han valorado poner por delante cualquier cuidado a los residentes antes que a su propio estado de salud» y transmitió un mensaje de tranquilidad a los familiares de los usuarios, ya que están recibiendo «la atención y cuidados que corresponde».