Dos metros de separación entre toallas
El Ministerio de sanidad ha elaborado un protocolo que deberán cumplir las piscinas cuando la evolución de la pandemia permita su apertura. Dicha pauta, consensuada con las comunidades autónomas y el sector, según el departamento que dirige Salvador Illa, recomienda abrir puertas y ventanas exteriores para circulación de aire en los espacios cerrados adyacentes, como vestuarios y baños, botiquín o salas técnicas. Cuando esta ventilación se realice a través de medios mecánicos, estos deben conservarse en buen estado de mantenimiento, limpieza y grado de desinfección adecuado. «Además, es esencial que se realice una exhaustiva limpieza antes de proceder a la desinfección de todo el mobiliario (vaso, corcheras, escaleras de acero inoxidable, duchas, paredes, taquillas, etc. ) y prestar especial atención a las superficies de contacto más frecuente como grifos, barandillas o pomos de puerta» asegura el Ministerio.
El Ministerio propone como medida restrictiva de aforo al menos doblar la superficie por persona en los espacios al aire libre y triplicarla en los espacios cubiertos. Para la entrada a la piscina se propone dibujar o colocar bandas en el suelo de recepción que marquen la distancia mínima entre personas de dos metros para acceder al mostrador y a la entrada. Todos los objetos personales como toalla, botes de crema, calzado de uso exclusivo, mochilas, etc. deben permanecer dentro del perímetro de seguridad establecido y evitar el contacto con el resto de usuarios.
Se deberá realizar limpieza y desinfección de las zonas de estancia y de tránsito de los bañistas, al menos dos veces al día, haciendo especial hincapié en las zonas más frecuentadas.