Tres mil leoneses plantan cara en la calle al Gobierno al grito de libertad

Alrededor de 3.000 personas tomaron ayer la avenida de Ordoño II al grito de «libertad» y «dimisión». Libertad, para los ciudadanos; dimisión, para el Gobierno, para su presidente. Esta irrupción masiva, pacífica y ruidosa en la principal arteria de la ciudad se convirtió en la primera manifestación de desacuerdo con las medidas de control en el confinamiento adoptadas por el ejecutivo, y que por lo que respecta a la capital leonesa van a mantener a lo largo de los próximos siete días, como mínimo, al nivel cero, en el extremo de las condiciones de aislamiento social.

No hubo convocatoria por los cauces legales que se requieren para realizar una protesta pública; tampoco con los argumentos extraordinarios requeridos en un momento en el que las concentraciones sociales en lugares públicos están prohibidas por el estado de alarma declarado desde hace dos meses. El llamamiento a la marcha se realizó a través de las redes sociales, mediante un manifiesto escueto y concreto en el que se relacionaban los motivos de la movilización, que coinciden con el nivel de hartazgo ciudadano que ya se ha expuesto en varias ciudades del país. «#SanchezVeteYa #GobiernoDimisión. Saca tu cacerola y tu bandera. Te esperamos en Santo Domingo para pasear por Odoño II. No olvides tu mascarilla y guantes. Mantén la distancia de seguridad de dos metros. León con España», rezaba la convocatoria en las redes sociales.

Las movilizaciones en el centro de Madrid de días pasados fueron la espoleta del estallido que se ha extendido por diversas capitales. Ayer tarde, la protesta se desató en León, y ese paso entre Santo Domingo y Guzmán recuperó la condición de escaparate de movilizaciones que tantas veces ha expuesto para otras causas. La de los ciudadanos disconformes con la imposición de confinamiento que ha decidido el Gobierno para tratar de frenar el avance del coronavirus tiene el hilo musical de las caceroladas. La chispa que prendió las movilizaciones en el centro de Madrid salta de núcleo urbano en núcleo urbano. Ayer llegó a León. Algunos analistas ven en este posicionamiento de protesta el gesto de la población que vence al miedo de retar al poder ejecutivo en medio de una situación de excepción, como este estado de alarma.

La protesta contra el Gobierno por la gestión de la crisis del coronavirus sorteó de forma espontánea la que Vox convocó para el próximo 23 de mayo, y que fue denegada por el riesgo que supone para mantener las normas de seguridad frente al virus.

Envueltos en banderas de España y con tintineo machacón de las cazuelas. Tres mil leoneses plantaron cara al Gobierno.