El nuevo reglamento colmó la paciencia de los pueblos babianos

Cuando los ganaderos y las cuatro juntas vecinales decidieron pelear contra la imposición del nuevo reglamento que va a aprobar Mieres, en torno al puerto de Pinos se acumulaban ya irregularidades perennes que se dejan notar con impacto ambiental en la zona, declarada espacio protegido, Zepa o lugar de interés. La lista que relata el abogado Carlos González-Antón parece inagotable: «A ver quién va a Picos de Europa y se hace una casa en el alto del puerto; pues aquí las hay, cabañas, sin ningún tipo de licencia, que son habitadas en época de verano». «O la casa Mieres, con restaurante, bar y demás, que tampoco tiene licencia ambiental». «Y la valla que están levantado con estacas de raíl, que necesitan una licencia de impacto ambiental por parte del Ayuntamiento, y se están llevando a cabo sin ningún tipo de control», interpreta el letrado González-Antón, que amplía el listado a «el abandono de las vías pecuarias, que cortan las mismas vallas que colocan desde el ayuntamiento mierense, sin encomendarse al reglamento que sobre cañadas, cordeles y veredas tiene la Junta de Castilla y León, que permanece al margen del asunto». La autonomía de Mieres En medio del recital de denuncias de irregularidades, aparece en la conversación con el abogado leonés el asunto del reglamento de gobierno y uso que quiere imponer Mieres. «Lo va a probar, porque está en fase de estudio desde el pasado mes de mayo, y por mucho que le diga el Principado, no le afectará porque el Ayuntamiento se ampara en su autonomía. Como no se controle desde León, van a hacer lo que hacen ahora, presionar a los ganaderos y tirar vallas por donde quieran. Lo que quieren los ganaderos y vecinos leoneses es que se sepa y se note que quien manda en esta parte es la administración autonómica, que es a la que compete velar por el derecho de este espacio», argumenta González-Antón, que tiene claro que el reglamento con el que amenaza Mieres no fue más que una gota que colmó el vaso de la paciencia de los babianos. Saneamiento ganadero Mieres, en contra de los derechos acreditados para los ganaderos leoneses, ofrece un nuevo calendario que retrasa la entrada de las reses babianas al puerto, a donde llegan los animales desde la vertiente asturiana sin los requisitos mínimos de saneamiento ganadero que exige la Junta a León.