Ordenan la vuelta urgente del pelotón del GRS de León destinado a Vandellós
Aparecen los primeros casos de contagios entre familiares directos de guardias afectados
Miembros del GRS, durante un ejercicio práctico en León.
Los dieciséis integrantes del pelotón del Grupo de Reserva y Seguridad de la Guardia Civil (GRS) destinados a la protección de la central nuclear de Vandellós (Tarragona), dos de los cuales presentaban a principios de esta semana síntomas relacionados con el virus, deberán regresar inmediatamente a León sin respetar la cuarentena, por orden de la Dirección General de la Guardia Civil que reemplazará al contingente leonés por otro pelotón de Barcelona.
La medida se conoció pocas horas después de que se confirmase que uno de los agentes de la Guardia Civil destinado al cuartel del GRS en La Virgen del Camino dio positivo y que también su esposa padece la enfermedad, víctima de un contagio directo.
Así las cosas, un alto cargo del grupo, tres oficiales, dos suboficiales y diez agentes permanecen en situación de contagio, a la espera de que se determinen las condiciones en las que se encuentran otros ocho guardias que han ofrecido síntomas compatibles con la enfermedad.
Además, varios agentes han expresado sus quejas ante la situación de inactividad en la que se encuentran los guardias que quedan en el cuartel, que no pueden realizar labores de patrulla y se encuentran en las dependencias del cuartel. Los agentes entienden que es un riesgo innecesario y que no es lógico.
La Asociación Unificada de Guardias Civies (AUGC) lamentó ayer la situación: «Siendo está una unidad de reserva podrían adoptarse otros sistemas de prestación del servicio, por ejemplo; combinando personal de libre, servicio guardia de localización o alerta con un periodo de localización 30-60 minutos y el restante de servicio necesario, guardando siempre las estrictas recomendaciones de distanciamiento. Además, sería conveniente planificar los servicios para que la realización del mismo sea en grupos estancos de trabajo».