La familia de la peregrina de Astorga apoya a los sanitarios españoles
La prima de Denise Thiem dona mascarillas en agradecimiento
Denise Thiem, la peregrina asesinada. DL
Desirée, la prima de Denise Thiem, la peregrina asesinada en Astorga hace cinco años, ha realizado una donación de mascarillas para los sanitarios españoles, según informa hoy El Confidencial.
La información señala que la familia de la peregrina norteamericana está, a pesar del dolor, muy agradecida a la policía española por el enorme esfuerzo realizado y porque los agentes encargados del caso les pudieron dar una respuesta a lo que había ocurrido. Y añade que cuando Desirée, la prima, se enteró por las noticias de que el coronavirus estaba golpeando con dureza a España escribió a uno de los investigadores con los que todavía guarda relación lo siguiente: "Hola, perdona que te moleste, acabo de ver en las noticias que en España médicos, enfermeras, auxiliares… En definitiva, todo el personal médico, no cuentan con mascarillas ni con trajes protectores para el Covid-19. Voy a comprar unas cuentas mascarillas N95 o de nivel médico 3 para mandarlas a algún hospital de Madrid. Me podrías sugerir a qué centro médico sería mejor que las enviara. ¿Sabes si los agentes de policía también andan cortos de material de protección personal, como mascarillas y guantes? Espero que estéis bien. Rezo por vosotros todos los días".
Desirée señala también que ahora tienen mucho material sanitario acumulado, por lo que quiere donarlo. Y su contacto le ha pedido que lo envíe al Hospital de La Paz, en Madrid.
El Tribunal Supremo confirmó en marzo de 2018 la condena a 23 años de cárcel y cerró definitivamente el asesinato de la peregrina estadounidense Denise Pikka Thiem, aunque la pena impuesta por la Audiencia Provincial —confirmada después por el Tribunal Superior de justicia de Castilla y León— supuso un descanso para su familia, que reside en Arizona. 20 años por el asesinato de la mujer, que recorría el Camino de Santiago buscándose a sí misma, y tres más por la concurrencia de un delito de robo con violencia pesan sobre Miguel Ángel Muñoz Blas, el huraño habitante del monte de Castrillo de los Polvazares, con el que se topó la viajera el 5 de abril de 2015, día de su desaparición. El reo se llevó a prisión el motivo para «realizar una acto tan bárbaro», subrayó la sentencia, que no refleja duda alguna de que el crimen responde a un acto alevoso, sin posibilidad de defensa por parte de la agredida.
Ocultar el cuerpo y su posterior hallazgo en avanzado estado de descomposición sólo causó «un especial dolor y sufrimiento» en la familia de la fallecida. Un jurado popular y 21 días de sesiones fueron necesarios para llegar a un veredicto de culpabilidad, si bien la decisión no fue unánime: uno de los jurados no consideró al encausado responsable del crimenLos billetes estadounidense que Muñoz Blas sustrajo a su víctima fueron la clave para ordenar su detención. Horas después llevó a la policía hasta el cadáver.
Durante el juicio se señaló la actitud de la empleada de la sucursal bancaria que cambió la divisa americana por euros a Muñoz Blas como elemento esencial para resolver el caso y proceder a su detención, así como la colaboración de éste tras confesar los hechos como forma de dar con un cadáver que primero enterró y, cuando no aguantó la presión policial, a finales de agosto de 2015, cambió de lugar a fin de burlar a los investigadores.
La condena se fundamentó en la confesión de Muñoz en sede judicial, horas después de su detención; en el que fuera él mismo el que condujo a los investigadores hasta el lugar donde finalmente había depositado el cuerpo, durante la reconstrucción de los hechos que se realizó al día siguiente y otros indicios, como el cese de las llamadas desde su móvil cuando se supo investigado.
Especialmente duro, pero clarificador resultó el informe de las forenses que realizaron la autopsia. «Denise recibió un golpe tan grande, tan horrible, que era incompatible con la vida», expusieron ante el jurado las doctoras. Impacto en el cráneo causado con un objeto romo, que también impactó en la mandíbula y en el lado izquierdo del tórax. Ante las facultativas, su abogada y sin presencia policial Muñoz Blas reconoció los hechos, en un relato preciso, profuso en detalles e incluso de impresiones subjetivas.