Diario de León

Hostelería

La restauración de León se reinventa para hacer frente al estado de alarma

Los establecimientos de la ciudad comienzan a servir cátering y a repartir comidas a domicilio

León

Creado:

Actualizado:

La industria leonesa de la restauración intenta hacer de la necesidad, virtud. Ante las cifras que amenazan la economía de la restauración en la provincia y que se mueven en cifras preocupantes (pérdidas del 50% de la facturación y destrucción del 25% del empleo) los empresarios han comenzado a sortear a través de la creatividad la parálisis a la que les obliga continuar en la fase 0 del estado de alarma. Muchos de ellos ya han comenzado y otros anuncian que a lo largo de esta semana pondrán en marcha nuevos planes de negocio con los que lograr que la rueda de la economía no se detenga en la ciudad.

La mayoría de ellos ha reconvertido su pasión por los fogones en el servicio a domicilio. Es el caso de Kamín (Calle Regidores). Su chef, Mario González Soria, acababa de inaugurar el establecimiento cuando llegó la pandemia. «Ya tenía pensado desarrollar este modelo de negocio, pero el Covid lo ha acelerado», cuenta. El cocinero abre el viernes un servicio de take away en el que se podrá elegir entre doce platos. «Será cocina tradicional, pero llevada a su máxima expresión», asegura el chef, que ofrece platos como mollejas ahumadas al wok con limón, steak tartar, escabeche con patatas o tortilla de patata. «Será una mezcla entre cátering y cuarta gama a precios asequibles y de altísima calidad», subraya.

Imagen del Nápoles, sirviendo a domicilio. MARCIANO PÉREZ

Los restauradores se quejan de que el daño ya está hecho y alertan de que este sector económico da empleo en León a 12.000 personas, de las que 3.000 se quedará sin trabajo, y supone el 13% del PIB en la provincia. «La administración tiene que dar ayudas directas, aumentar las exenciones de tasas, incrementar el espacio de las terrazas y un largo etcétera, porque vamos a ingresar menos y a gastar mucho más», destaca Martín Méndez, presidente de la Asociación de Hosteleros de León.

Destaca, por ejemplo, que la nueva normativa con la que tendrán que enfrentar esa nueva normalidad de la que habla el Gobierno implica que los camareros no puedan cruzarse y las distancias de seguridad se tendrán que mantener. «Esto supone que necesitaremos más trabajadores para un volumen de negocio inferior», advierte al tiempo que lamenta que de seguir las cosas como hasta ahora, habrá más de mil negocios que no volverán a abrir. Por eso también exige al Ayuntamiento, a la Diputación y a la Junta que pongan en marcha planes para rescatar a uno de los sectores que más sufrirá con la crisis.

Mario Gómez, del Kamin. FERNANDO OTERO

El chef del restaurante Pablo -con una estrella Michelín-, Juanjo Losada, también inicia un nuevo modelo, si bien lo hará cuando la ciudad ingrese en la fase I. «Haremos microcátering para un mínimo de seis personas y un máximo de diez», revela el cocinero, que explica que se ofrecerá un menú degustación más breve que el que se sirve en el restaurante. «Habrá un aperitivo, un guiso, carne, pescado y postre», que añade que la comida se servirá en la propia casa del cliente y con la vajilla del restorán. Además, Juanjo Losada manifiesta que en la fase II abrirán el establecimiento sin grandes cambios, puesto que las medidas de seguridad que marcará la ley ya la cumplen con el número de mesas y la distancia social. El chef alerta a los leoneses de que en este momento «hay que gastar aquí». «Hay que potenciar la economía de León y la única manera de lograrlo es que el dinero de los leoneses se mueva».

Una de las cafeterías que antes realizó el cambio de modelo fue el Orlys. Situado en Alcalde Miguel Castaño, su propietaria, Maricel, comenzó a anunciarse en redes el pasado 1 de mayo. «la gente ha respondido muy bien porque doy calidad», señala al tiempo que indica que los gastos no son altos porque ella misma reparte a domicilio. «Hacemos unos 25 o 30 servicios a la semana y la especialidad son las tortillas», explica la cocinera, que pronostica que la gente tardará en llenar bares y restoranes.

tracking