Salud sobre dos ruedas y encima de una bicicleta

El ciclismo cuenta con libro de ruta en la fase de desescalada. Desde el profesional al federado pasando por el aficionado. Así lo ha establecido el Gobierno para las cuatro fases que llevarán a cierta normalidad.

En el caso del profesional y con varias quejas por parte de sus protagonistas tanto por la tardanza en posibilitar su regreso a los entrenamientos como por ciertas medidas que consideran poco prácticas, la vuelta a una cierta actividad, por ahora sin ser competitiva, llegaba dentro de la fase 0 en la que se posibilitaba la práctica de la bicicleta e el caso de los catalogados de alto nivel o de interés nacional por parte del Consejo Superior de Deportes a los que se permitía el poder ejercitarse sin límite de kilómetros siempre que fueran por la misma provincia. Para el resto los límites estaban en el municipio en el que residan.

Ya esta situación ha cambiado para la Fase 1 en el casi de los que la hayan alcanzado o para, como el casi de León, lo hagan en buena parte de su territorio el próximo lunes 25 de mayo. En este caso los límites provinciales serán para todos por igual con la particularidad de que ya estarán más cerca de poder alcanzar un nuevo escalón.

El de entrenar durante gran parte del día salvo las horas estipuladas para las personas con más de 70 años o con diferentes discapacidades. Hasta ahora la posibilidad de entrenar para profesionales, federados y aficionados por igual era de seis a diez de la mañana y de ocho de la tarde a once de la noche.

Algo que precisamente los profesionales consideran demasiado restrictivo, circunstancia que ya ha planteado la Federación Española al plantear que la actividad en especial de los ciclistas profesionales se realiza en la carretera y nunca en zonas con densidad de población por lo que la seguridad queda garantizada, y más en las escuadras de primer nivel que aún cuentan con el problema añadido de la diferente reglamentación y restricciones que existen para sus ciclistas dependiendo del país del que procedan.

También en las medidas de seguridad se han establecido unos parámetros válidos para todas las categorías y que incluyen entre otras cosas la distancia física entre un ciclista y otro que no debe ser inferior a los diez metros. La higiene en cuanto a los equipos utilizados en caso del material es también destacada impidiendo compartir uno y otro sin que se haya asegurado de su limpieza.

Lo que no s obligatorio aunque cada uno puede utilizarla si quiere es el uso de la mascarilla, en cierta medida por la actividad en algunos casos de extrema fatiga que puede realizarse y que podría afectar al sistema respiratorio. Eso sí, cuando la distancia de seguridad especialmente para los ciclistas aficionados no sea posible de guardar la mascarilla será también un elemento necesario.

En cuanto a los entrenamientos en grupo todavía tendrán que esperar los practicantes o profesionales de las dos ruedas. Algo que en cierta medida también ha molestado a los equipos que ven un agravio respecto a otros deportes como el fútbol en el que pueden entrenar hasta diez jugadores juntos y en el caso del ciclismo es casi una quimera al no poder acercarse a menos de diez metros uno de otro.

Los propios equipos ya han elevado una petición para que pueda subsanarse con el fin de empezar a planificar una temporada que va a quedar reducida a la mínima expresión aunque con las tres grandes presentes en el calendario (eso sí lejos de sus fechas habituales) y que también tiene como protagonista en el apartado femenino a la escuadra leonesa Eneicat RBH Global que pretende también empezar a entrenar con varias de sus integrantes al encontrarse otro grupo importante fuera de España debido a la pandemia del coronavirus y las restricciones impuestas para la entrada y salida por parte de las autoridades de los respectivos países. Algo que pretenden que cambie muy pronto.