Diario de León

Medio Ambiente

Los 11 cipreses monumentales que ardieron en La Edrada tienen relevo

Cacabelos talará los árboles de 150 años quemados al constatar que es imposible recuperarlos

Ponferrada

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«A todos nos produce tristeza ver cómo sus esqueletos se mantienen erguidos, pero después de un tiempo prudencial, y sin recuperación posible, hemos considerado por razones de seguridad talarlos y estos días una empresa especializada se hará cargo del trabajo». Así anunciaba ayer la concejala de Medio Ambiente de Cacabelos, Inés Díaz, el cierre temporal del cementerio de La Erada para proceder al corte de los 11 cipreses monumentales que ardieron el 9 de mayo de 2017. Quedan otros 16 plantados hace un siglo y medio.

Tres años y medio después del incendio, el Ayuntamiento de Cacabelos ha constatado que es imposible recuperar los 11 árboles y se dispone a ejecutar un proyecto de saneamiento para los que siguen vivos y de paso replantar los ejemplares del pasillo central y poblar el resto de enredaderas. Díaz, que en 1988 participó en la primera excavación arqueológica en el yacimiento de La Edrada junto a Julio Vidal Encinas, recordó que los 27 cipreses mediterráneos. cupressus sempervirens, fueron plantados hace 150 años en un cementerio que tiene sus orígenes en un época tan remota como la Alta Edad Media entre los siglos VIII y XI en torno a la capilla románica de Santa María de la Edrada.

Saneamiento

 El Ayuntamiento prepara un plan de saneamiento de los 16 cipreses vivos plantados en 1878

El cementerio actual de Cacabelos se construyó en 1878 y en 1989 el campo santo anexo donde se excavaron los restos del primitivo yacimiento romano que ahora se exhiben en el Museo Arqueológico de Cacabelos y en el Museo de León.

«La necrópolis actual se asienta en uno de los yacimientos más importantes del territorio berciano», explicó Inés Díaz en una nota en la que recuerda que la Junta de Castilla y León ya catalogó el yacimiento en 1994 como Bien de Interés Cultural. Los restos urbanos que se conservan, una calle con alcantarillado y vestigios de edificios del siglo II al IV, están protegidos por una tapia.

La edil recordó la importancia que tiene La Edrada en todas sus fases históricas hasta la actualidad. «Este espacio siempre debió estar presente en el colectivo social como lugar importante, público y sacro y es para todos los cacabelenses el lugar donde reposan sus seres queridos, y panteó de algunos grandes escritores hijos de Cacabelos, como Antonio Fernández y Morales, primero escritor en lengua gallega, la poeta Manuela López García y Fermín López Costero, escritor.». La edil pidió a los vecinos de Cacabelos que, «por razones de seguridad», disculpen estos días las molestias que la tala de los 11 cipreses muertes puedan causarles ante el cierre temporal del acceso al cementerio municpal de La Edrada.

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