La ausencia de una concejala del PRB frena el intento de la oposición de quitar el «tasazo»

El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, evitó ayer con su voto de calidad una derrota que se anunciaba segura tras confirmar Tarsicio Carballo que iba a votar junto con el resto de la oposición la propuesta para devolver los recibos de la nueva tasa de la basura e iniciar el expediente para su eliminación. La ausencia de la otra concejala de la formación bercianista, María Arias, por una indisposición anunciada poco antes de iniciarse el Pleno, dejó sendos empates a 12, que Ramón solventó con la potestad que le confiere la ley.

La ausencia de Arias benefició tanto al alcalde, que salvó el coste político de perder las dos votaciones en un pleno forzado por la oposición, como a Tarsicio Carballo, que con su gesto de votar a favor de la moción intentó salvar su posición después de convocar una manifestación contra la nueva tasa cuando se aprobó en 2019. Además, la sesión evidenció hasta qué punto son necesarios para el tripartito los dos concejales del PRB tras la salida del PSOE de Manuel de la Fuente, que ayer dejó caer que se había producido un «tamayazo» en la votación.

El debate, en el que no participó el alcalde, salvo para anunciar su voto de calidad, puso de manifiesto también las distancias personales y políticas cada vez más evidentes entre oposición y equipo de gobierno en un momento crítico para la ciudad, que suma a la crisis de la pandemia el final del carbón, el gran motor económico de Ponferrada en el último siglo. Prueba de ello es que el concejal de Medio Rural y portavoz de CB, Iván Alonso, llegó a pedir a la oposición que presente una moción de censura «si tiene una alternativa». «No se puede estar soportando este estrés», enfatizó.

No tenían claro PP, Cs, USE y Manuel de la Fuente que todo fuese sobre ruedas tras el anuncio de Tarsicio Carballo y así se confirmó en la sesión con la ausencia de María Arias, aunque apenas pidieron explicaciones al portavoz del PRB, salvo en un comentario de Folgueral —«alguien debería explicar por qué somos 24 en lugar de 25», se preguntó— y otro de Ruth Morales. «Su voto no va a servir para nada», le dijo a Carballo a la vista de la ausencia de Arias.

El portavoz del principal grupo de la oposición, Marco Morala, del PP, aseguró que son los ponferradinos y ponferradinas los que están exigiendo al Ayuntamiento medidas fiscales que les ayuden a superar la crisis. Por eso defendió tanto la eliminación de la tasa de basura como la devolución de las cantidades abonadas, que justificó con informes del Ayuntamiento de Madrid, una de las últimas ciudades donde se ha devuelto dinero a los contribuyentes. «Ni obliga Europa, como ustedes dicen, ni es ilegal la retroactividad», afirmó Morala.

Todos los grupos de la oposición defendieron la eliminación de la tasa en un momento como éste, «donde hay mucha gente que lo está pasando mal», enfatizó el concejal no adscrito Manuel de la Fuente. Samuel Folgueral evitó entrar en un «pim, pam, pum» con el equipo de gobierno para centrarse en una propuesta que, a su juicio, es necesaria para Ponferrada. Tras defender también la legalidad de devolver el dinero cobrado pese al informe del tesorero, el portavoz de USE se preguntó por qué el Ayuntamiento ya no puede funcionar sin los 2,2 millones que se recaudan. «¿Si podía antes, por qué no puede ahora?»

Ruth Morales, de Cs, puso otros ejemplos de devoluciones de tasas, como en Utrera, y acusó al equipo de gobierno de necesitar su recaudación por el «despilfarro» de su «nefasta» gestión. «Aquí no venimos a hacer populismo», advirtió al equipo de gobierno.

Los tres portavoces del tripartito rechazaron la eliminación de la tasa a la vista de los informes de los técnicos y remarcaron que, en caso de salir adelante la votación, no se podía devolver el dinero cobrado, algo que ratificó, a petición del alcalde, el tesorero, que explicó a los concejales que toda la jurisprudencia coincide en la no retroactividad. Además, remarcó que no era competencia del Pleno la devolución de recibos.

Como en plenos anteriores, el portavoz de Coalición por el Bierzo, Iván Alonso, fue el más contundente, más que la propia portavoz del PSOE en esta ocasión, que fue Mabel Fernández como concejala de Hacienda. Así, calificó la propuesta de la oposición de «carretillo de propaganda» y pidió explicaciones al portavoz del PP. «Cómo se atreve a prestarse a esta performance. Esta propuesta nos dejaría en una situación complicadísima», le advirtió.

Mabel Fernández justificó la nueva tasa en la necesidad de tomar medidas impopulares para responder a la mala gestión de anteriores equipos del PP; lo que la concejala de Hacienda definió como «ética de la responsabilidad», y dirigiéndose también al portavoz de los populares le acusó de «vivir en el cortoplacismo». Lorena González, de Podemos, echó en cara al PP que sufran ahora las consecuencias del plan de ajuste de sus años en el gobierno municipal.

A la espera de la votación, Tarsicio Carballo fue el centro de los focos. En varias ocasiones, insistió en que el PRB «es un partido serio y responsable» después de criticar a la oposición porque sólo contaron con él a última hora. Ya en su última intervención, reconoció que su voto iba a ser «un brindis al sol». «El PRB se presta a hacer cosas en beneficio de Ponferrada, aunque a veces molestemos, y a lo mejor este Pleno viene a cuento de esto», añadió.

Folgueral, por su parte, se contratuló de haber intentado, al menos, «que el dinero volviera al bolsillo de los ciudadanos».

Mabel Fernández resumió el pleno en «un spot publicitario» y reconoció que Carballo es el único de la oposición «con altura de miras» y sentido «constructivo» pese a sus críticas «brutales» al equipo de gobierno.