Carracedelo convierte el Canal Bajo en su primera reivindicación

El Bierzo ya no sabe cómo pedir que se modernice el Canal Bajo para sumarse a los regadíos del siglo XXI. La inauguración de la Feria del Bierzo en el recinto del Oro de Roma, en Carracedelo, se convirtió ayer en un grito para exigir la modernización del campo berciano, con gran potencial pero atado de pies y manos por el minifundio y la falta de relevo generacional.

Fue el anfitrión, el alcalde de Carracedelo, Raúl Valcarce, quien lanzó un órdago a las administraciones superiores, la Junta de Castilla y León y el Gobierno Central. «Este tiene que ser un proyecto de futuro importante, y tiene que tener, de quien corresponda, el 80% de subvención a fondo perdido para renovar los regadíos de la comarca del Bierzo», dijo Valcarce, que anunció que, a partir de ahora, así lo repetirá en cada comparecencia pública que haga como alcalde.

«Es una petición unánime de todos los regantes del Canal Bajo del Bierzo, que se extiende también al Canal Alto, para mejorar una infraestructura que dejaríamos arreglados ambos canales», insistió el regidor de Carracedelo, que pidió el apoyo de todas las administraciones en la apertura de la XXVI edición de la Feria del Bierzo, que reúne este fin de semana a más de un centenar de expositores en el Oro de Roma, tanto de agroalimentación como de turismo.

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, presente en el acto, que se puso ayer en marcha después de dos años en silencio por culpa de la pandemia, recogió el guante y reclamó al Gobierno que se implique en la modernización. Suárez-Quiñones valoró el potencial del sector agroalimentario de la comarca del Bierzo e insistió en que, para que siga siendo pujante, necesita que se acometa esa obra.

En sus declaraciones a los medios, el representante de la Junta recordó que el sector agroalimentario del Bierzo tiene más de 2.000 empresas y suma 12.000 empleos y remarcó que la Junta le ha apoyado con un plan de choque dotado con 68 millones y una fiscalidad diferenciada.

Aseguró, además, que, por parte de la Junta, los pasos están dados y anunció que en cuanto la obra se declare de interés público y de urgente ejecución, «no se dejará al Gobierno que no se implique».

Por su parte, el presidente de la Diputación de León, Eduardo Morán, rebatía las palabras del consejero y reclamaba a la Junta que tuviera esta obra entre sus prioridades. Morán explicó que ha pedido una reunión a cada consejero, de las que hasta ahora sólo ha celebrado una con Suárez-Quiñones. Al consejero de Agricultura, añadió, le pedirá que se declare la obra como prioritaria «para que así la atienda el Gobierno de España». «Ese compromiso lo ha adquirido el Gobierno de España y la Seiasa con este presidente de la Diputación Provincial y lo único que necesitamos es que la Junta de Castilla y León dé también ese paso, para que esté en el primer lugar y no en el noveno. Me gustaría que a lo largo del año 2022 se hicieran todas las gestiones para que fuera un compromiso firme», insistió.

Morán, por otra parte, tuvo palabras de elogio para el Ayuntamiento de Carracedelo por mantener ya la Feria durante 26 años. «Como Diputación, apostamos por este tipo de eventos para ayudar a un sector que representa el 14% del PIB de la provincia», dijo. «Quiero felicitar especialmente a su alcalde», insistió el presidente de la institución provincial.

El presidente del Consejo Comarcal, Gerardo Álvarez Courel, dio también su apoyo la Feria.