«Ciuden tendrá un papel importante; es un referente»
— El presidente de la Diputación anunció que había un proyecto que podría generar miles de puestos de trabajo. ¿Esa declaración está relacionada con alguno de estos ocho proyectos?
— «Las propuestas son variadas y el rango de nivel de empleo va desde decenas hasta centenares de puestos de trabajo, pero no querría generar expectativas de miles de empleos. Vamos a tener los pies en el suelo, analizarlas bien con todos los miembros de la mesa de evaluación».
— ¿Qué papel puede tener la Ciuden en la reindustrialización de la comarca?
— «Ciuden tiene un papel muy importante, fundamental. Al final es el referente tecnológico del Ministerio de Transición Ecológica. Ha trabajado sobre proyectos de captura de CO2 y creemos que lo tendrá en proyectos que son necesarios para la transición ecológica como son proyectos de almacenamiento, de baterías, de hidrógeno. Con Ciuden y la Fundación Santa Bárbara estamos trabajando también en planes de formación destinados a las personas del territorio, de Cubillos, Ponferrada, de Cabañas… Iniciamos en junio el primer curso para el desmantelamiento de centrales, que ha levantado expectativas. La suma total de beneficiaros de las actividades de formación superará las 400 personas».
— ¿Qué es lo más complejo de desmontar una central térmica, sobre todo porque tampoco se han desmontado tantas en España? Creo que sólo una en Barcelona.
— «Sí, una central nuestra. Efectivamente, es una actividad nueva que entraña su complejidad. Va a ser un proyecto largo, que durará entre cuatro y cinco años. Son instalaciones industriales que se construyeron durante muchos años, chimeneas de casi 300 metros, torres de refrigeración, calderas…Son trabajos que tienen que ir muy planificados y coordinados, empezando por la seguridad de las personas. Lo planteamos también como una idea de economía circular. Todos los equipos y materiales van a ser analizados. No queremos que sea una fuente de problemas y residuos. Esto introduce otro factor de complejidad. Nuestra intención es contratar los servicios de demolición en las próximas semanas e iniciar en el mes de septiembre los trabajos».
— Estos meses ha habido mucha controversia con el personal de las auxiliares de Endesa, ¿se va a contar ahora con ese personal que ha trabajado para Endesa durante tantos años?
— «Absolutamente, sí. Para nosotros es prioritario que el empleo sea local y empleo de las personas que han estado trabajando con nosotros. Por eso hemos lanzado este plan de formación. En el caso de Compostilla estamos desmontando ya los grupos I y II y están trabajando más de ochenta personas. Podría decir que casi el 80 % son del Bierzo y la mayoría proceden de las subcontratas. Cuando empecemos con los III, IV y V continuaremos con esta prioridad. De hecho, hemos puesto una condición en la licitación de las empresas que van aparticipar en el desmantelamiento de un mínimo de contratación local».