Diez pueblos del entorno de Ponferradatienen todavía sus calles sin asfaltar

La promesa del alcalde de Ponferrada de que ningún ciudadano pisará barro y contará con las calles o caminos asfaltados va camino de cumplirse, pero lo cierto es que en la actualidad siguen existiendo una decena de pueblos que cuentan con al menos uno o varios viales en los que no hay cemento, ni asfalto, ni tan siquiera zahorra. Durante la legislatura que ahora va camino de cumplirse han sido más de medio centenar las calles que han dejado el atraso y se han subido al carro de la normalidad. Ese medio centenar de calles que fueron encementadas o asfaltadas no sólo estaban diseminadas por los pueblos del municipio de Ponferrada, sino que se encontraban en los barrios de la ciudad. Sin ir más lejos, en Flores del Sil se está acometiendo la urbanización de un importante vial que estaba de tierra. Mucho se ha avanzado en esta materia, y la concejalía de Medio Rural que dirige la concejala María Gutiérrez tiene datos suficientes para demostrar el trabajo realizado, pero no está todo hecho. Ahora mismo se va a hormigonar una importante calle que bordea Villar de los Barrios. También se urbanizará la plaza del pueblo, que estaba como cuando eran habituales los espacios públicos de tierra. En el pueblo de Campo también se han arreglado muchas calles de tierra, y en la actualidad existen tres tramos que permanecen así, aunque desde el Ayuntamiento tienen ya previsto subsanarlo. Problemas en Compludo También es cierto que, aunque desde el Ayuntamiento de Ponferrada han intentado solucionar carencias de viales principales de tierra, los vecinos han sido los que han puesto problemas. El ejemplo se da en el pueblo de Compludo. La calle principal está de tierra, pero hay vecinos que se oponen al arreglo de la misma porque delante tienen las moreras de madera para quemar en los tiempos difíciles del frío invierno. También hay propietarios que defienden que parte de lo que se quiere arreglar es de propiedad privada. Y así, pasa el tiempo, y el pueblo sigue pisando barro en invierno. También hay calles sin asfaltar en Montes de Valdueza, pueblo eminentemente turístico por su monasterio y encanto emplazado en pleno Valle del Silencio. En Fuentesnuevas había hasta hace muy poco varias calles en las mismas circunstancias, pero el Ayuntamiento ya las arregló por primera vez. En el pueblo de Rimor faltan también por asfaltar dos o tres calles de tierra. Se aplicó zahorra en otras cuatro o cinco que estaban también mal, y de esta forma los vecinos dejaron de pisar barro poco antes de las pasadas Navidades.