Diputación mediará con la Caja para aplazar las deudas de Cacabelos

La agónica situación económica del Ayuntamiento de Cacabelos tendrá su siguiente escena en los despachos de Caja España-Duero, después de que la presidenta de la Diputación de León, la popular Isabel Carrasco, recibiera ayer en León al alcalde berciano, Adolfo Canedo, y se comprometiera a mediar con la entidad financiera para intentar un aplazamiento de las deudas y estudiar los créditos. Canedo le solicitó auxilio y Carrasco ha intercedido para promover un encuentro entre el mandatario de Cacabelos y el presidente de Caja España, Evaristo del Canto. Entre ellos analizarán vías de ayuda dentro de una posible «modificación de los créditos».

En la rueda de prensa, la presidenta de la Diputación solicitó al PSOE leonés y a su secretario provincial, Francisco Fernández, que se ponga «al frente de este caso» que deriva, —según dijo— de la «nefasta gestión de un señor que ha sido durante ocho años alcalde», en referencia al anterior regidor socialista, José Manuel Sánchez.

Trato de favor a un alcalde socialista. En este sentido, Isabel Carrasco llegó a poner de manifiesto y denunciar que durante el gobierno municipal del anterior alcalde socialista se produjo «bastante trato de favor hacia el Ayuntamiento de Cacabelos por ser, yo creo, del PSOE».

En la misma comparecencia ante los medios después del encuentro con Carrasco, el alcalde popular de Cacabelos dijo que el ayuntamiento que dirige desde el pasado junio «está muerto» y que a día de hoy su único objetivo es «buscar dinero para pagar las nóminas». En esta línea avanzó que, a partir de octubre, el pago de los sueldos municipales constituyen «una incógnita». Adolfo Canedo recordó que el adelanto de 120.000 euros de la recaudación del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que el martes firmaba la Diputación servirá para abonar a los trabajadores el salario de agosto y confía en que con lo que les falta por recibir de los tributos del Estado «podamos hacer frente a las nóminas de septiembre».

Más acciones judiciales por presunta «connivencia». Canedo ha anunciado que emprenderá acciones legales por vía penal ante la sospecha de que se haya producido una «connivencia» entre «alguien de dentro de la administración» y una serie de empresas acreedoras que no han exigido sus deudas hasta la entrada del nuevo alcalde en el Ayuntamiento. Citó como ejemplo el caso de Gas Natural.

Según el regidor, le están exigiendo deudas por cuantías que no coinciden con los números que refleja la contabilidad municipal. Canedo ha hecho responsables de la situación que vive el municipio, y ha pedido ayuda, al Gobierno central, a la delegación autonómica del Ejecutivo, a la Subdelegación del Gobierno en León, a la Junta de Castilla y León y al presidente del Consejo de Cuentas de Castilla y León por no haber hecho nada durante la pasada legislatura en la que el actual alcalde ya denunció irregularidades. Según ha concretado el alcalde berciano, el Ayuntamiento tiene una deuda financiera de 2,7 millones de euros, con 1,5 millones en mora y otros 4,5 que reclama la Justicia al consistorio con «sentencias firmes».