Las cuencas mineras leonesas pueden optar a 120 millones de euros del plan de resiliencia

El secretario general para el Reto Demográfico, Francisco Boya, y la directora del Instituto para la Transición Justa (ITJ), Laura Martín Murillo, han desgranado hoy una larga lista de desembolsos millonarios ya realizados, o a los que se puede acceder en el futuro, para la recuperación de las comarcas mineras. Lo han hecho durante una visita a las instalaciones de la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden), en el Bierzo.

La provincia podría acceder a un fondo de 120 millones de euros del plan de resiliencia, que se destinaría sobre todo a programas de ayudas formativas para la reorientación laboral en zonas de transición justa; a la línea de infraestructuras digitales, sociales y ambientales, que incluye un servicio de asistencia técnica para los entes municipales; a la financiación total de la clausura de instalaciones mineras; y la rehabilitación del espacio natural afectado por su actividad.

Los representantes gubernamentales han explicado que las distintas líneas de actuación "tienen el objetivo de apoyar a las personas, el territorio, las minas sin actividad, las empresas y a la propia Ciuden para generar nueva actividad económica en los municipios afectados de la provincia".

Prejubilaciones y bajas laborales de 2018

El ITJ destinará 107,8 millones de euros de ayudas para León, "una cifra que incluye los costes de las prejubilaciones y bajas incentivadas de los trabajadores de las minas que cesaron su actividad en diciembre de 2018 en cumplimiento de la normativa europea, que ascienden a 44,6 millones", señala la nota oficial del Gobierno.

También contempla en este presupuesto el servicio de orientación laboral para estos trabajadores, presupuestado en 900.000 euros, y las ayudas para infraestructuras de municipios mineros y con centrales térmicas en proceso de cierre, que han recibido 23,7 millones.

Además, el Instituto ha invertido 20,2 millones en restauración y recuperación de zonas afectadas por la actividad minera del carbón, que incluyen la actuación en la mina Nueva Julia (Cabrillanes y Villablino) y las ayudas al cierre de la mina La Escondida (Caboalles de Abajo).

 

Para la Ciuden

Para apoyar iniciativas empresariales y pequeños proyectos de inversión, el ITJ ha destinado 2,4 millones y 16 millones de fondos propios a la reactivación de Ciuden, encaminados a materializar el papel de la Fundación como "actor clave en la transición energética y en la implantación de las políticas de Transición Justa a nivel nacional", señala la nota oficial.

De esta manera, Ciuden ejercerá como órgano técnico para la elaboración de los Convenios de Transición Justa y como gestor de ayudas y subvenciones vinculadas a la generación de una economía alternativa en los territorios afectados por cierres de minas de carbón y centrales térmicas.

El pasado mes de mayo, el Miteco publicó la adjudicación de las primeras ayudas gestionadas por Ciuden para territorios de transición Justa: 7 millones de euros dirigidos a entidades locales afectadas por el proceso de cierre de centrales termoeléctricas de carbón. Un total de 15 proyectos propuestos por 11 ayuntamientos han accedido a ayudas por un importe de 5,5 millones de euros. La puesta en marcha de estas actuaciones deberá llevarse a cabo en un periodo de 24 meses y generará, al menos, 160 empleos a tiempo completo.

La Fundación Ciudad de la Energía podrá contar, además, con el soporte de los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para llevar a cabo proyectos de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) sobre almacenamiento energético e hidrógeno renovable. Con una dotación estimada de 30 millones de euros, ambas iniciativas supondrán el relanzamiento de Ciuden como centro de innovación del Estado en un territorio históricamente vinculado a la producción energética.

 

Fondos del plan de recuperación 

De las tres líneas de trabajo de Transición Justa contempladas en el Componente 10 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia -que cuenta con un presupuesto de 300 millones de euros-, las estimaciones del ITJ apuntan a que la provincia de León podría ser receptora de hasta 120 millones. Estos fondos se dedicarían al programa de ayudas formativas para la reorientación laboral en zonas de transición justa; a la línea de infraestructuras digitales, sociales y ambientales, que incluye un servicio de asistencia técnica para los entes municipales; a la financiación total de la clausura de instalaciones mineras; y la rehabilitación del espacio natural afectado por su actividad.

El Plan de 130 medidas ante el Reto Demográfico, aprobado por el Gobierno en marzo con una dotación de 10.000 millones de euros, supone otra pieza clave para la revitalización de estas zonas. El proyecto plantea un marco de actuación de carácter transversal que aborda de forma sistémica el fomento de la cohesión social y territorial, y permite que cada territorio actúe en aquellos ámbitos que considere prioritarios para su desarrollo, tanto en la identificación de necesidades como en el impulso de iniciativas y proyectos. De la misma manera, está alineado con las inversiones que promueve el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para las áreas rurales y los municipios de menor población, incidiendo en la sostenibilidad, la plena conectividad y la inclusión social