LM quiere despedir a 393 trabajadores y ofrece recolocaciones en Francia y Castellón

La dirección de LM Wind Power confirmó, ayer, al comité de empresa su intención de despedir al 40% de la plantilla de la fábrica de palas eólicas ubicada en el polígono industrial de La Llanada (Santo Tomás de las Ollas). Son, exactamente, 393 los despidos previstos y «repartidos entre todas las secciones, turnos y puestos», aseguró el presidente del comité, Gabriel Garnelo, al término de la primera reunión de la comisión negociadora. Ambas partes volverán a sentarse en la mesa el día 20 de este mes para abordar el despido colectivo y también la modificación de las condiciones de trabajo que la empresa ha planteado y que pasa por recuperar los turnos que la plantilla venía haciendo hasta que se aprobó la rotación de cuatro días de trabajo por dos de descanso, sin tener en cuenta fines de semana o festivos.

Ahora sí, ahora la dirección de la factoría berciana propone un calendario productivo en tres formatos. La gran mayoría de la plantilla —explicó Gabriel Garnelo— trabajará de lunes a viernes y habrá un turno de martes a sábado y otro turno de miércoles a domingo. «La producción se concentrará de lunes a viernes y los pocos que trabajen el fin de semana lo harán más bien para temas de mantenimiento», dijo el presidente del comité, que considera que detrás de todo esto hay una intención de reducción de costes y ahorro. «Se ahorran el 40% de las nóminas y seguros sociales y el 25% de salario» de los que quedan, explicó. Ese 25% se correspondería con lo que los operarios perciben por trabajar los fines de semana cuando les toca sábado o domingo dentro de su turno.

En base al turno 4-2 con el que está operando la plantilla de LM actualmente, «cada persona trabaja una media de 66 días en fin de semana», explicó Garnelo. Eso es lo que se ahorraría la empresa con el cambio del calendario de turnos que ha puesto sobre la mesa en un momento tampoco casual, según denunció el comité de empresa.

«La implantación del calendario 4-2 hace un año, el enorme número de horas extraordinarias realizadas y el asfixiante ritmo de trabajo impuesto han provocado que la producción prevista para este año esté casi completa a estas alturas», aseguró el presidente del órgano de representación de los trabajadores. Es decir, la plantilla ha hecho en prácticamente medio año el trabajo que estaba programado para todo el año. Y la respuesta de la multinacional a eso es un despido masivo. «No sabemos muy bien cuando quiere ejecutarlo», aseguró Garnelo. Tampoco tienen todavía ninguna lista con los nombres de los trabajadores que están en el punto de mira.

Deslocalización

En la reunión celebrada entre dirección y comité de empresa de la factoría berciana de LM Wind Power, la primera también puso sobre la mesa la posibilidad de recolocar a 265 de los 393 trabajadores despedidos en las fábricas propiedad de la multinacional en Castellón y Cherburgo (norte de Francia). La propuesta pasa por trasladar a 25 a la primera ubicación y a 240 a la segunda, según las cifras recogidas en la documentación que ayer le fue presenta al comité de empresa.

«Se ha presentado un plan de recolocación interna y también uno de recolocación externa con alguna empresa que se dedica a ello dentro del mismo sector», apuntó el presidente del comité, dejando claro que a esto «están obligados por ley». «No es que sean buenos samaritanos, sino que los pasos que están dando son los que establece la legislación para paliar los daños en caso de despido colectivo», añadió.

Con la documentación del ajuste laboral ya en la mano, tras días de elucubraciones y las únicas informaciones que han estado apareciendo en los medios de comunicación, el comité de empresa se reunirá esta mañana para analizarlo todo detenidamente y determinar los pasos a seguir. El siguiente será convocar asambleas con los trabajadores para darles traslado de los planes de la multinacional.

Empieza la lucha

La plantilla ya ha empezado a hacer visible su malestar con pintadas y pancartas que denuncian la «traición» de LM y que «el Bierzo no olvida» en alusión a lo que ya sucedió en 2011. El sindicato CGT está siendo el principal acicate en este sentido y ha decidido llevar la protesta a todo el Bierzo con una pancarta que se ha visto en el mirador de Orellán, uno de los puentes de la N-VI en Ponferrada y también en Bembibre, entre otras localizaciones. «Nos hemos empeñado en que esta lucha llegue a todos los rincones del Bierzo. Nos encargaremos de que hasta el último vecino de nuestra comarca se entere de lo que esta pasando y del daño que hace esto a nuestra región», ha explicado la CGT en sus redes sociales.

«La gente ha trabajado mucho y muy duro y ahora se sienten engañados, estafados y maltratados. En ningún momento se veía venir esto, porque en el sector eólico hay una demanda brutal», aseguró el presidente del comité de empresa, insistiendo en que se trata de una maniobra «de recortes para minimizar costes y ganar más dinero». Un plan de extinción de empleo que afecta «no solo a 393 personas, sino a 393 familias. Estamos hablando de una cifra importantísima para una comarca como la del Bierzo y tal y como está ahora mismo», criticó Gabriel Garnelo.

«Hoy pueden ser 300 y mañana otros 300», advirtió el presidente del órgano de representación de los trabajadores. «No queremos que vuelva a ocurrir lo que pasó en 2011», añadió. Por eso, el comité quiso dejar claro que su posición sigue siendo la misma que la del pasado martes: «cero extinciones de empleo».