Reportaje | m. j. alonso
Los Reyes de la solidaridad
La asociación ecologista Bierzo Natura reconoce la labor del Banco de Alimentos del Sil en la primera edición del Premio Reyes Magos del Bierzo
Damián Tascón recibió una placa de manos de varios miembros de Bierzo Natura.
No todos los Reyes Magos llegan de Oriente y sino que se lo pregunten a los treinta y cinco voluntarios del Banco de Alimentos del Sil, que sólo en el año que acaba de finalizar han repartido un total de 750 toneladas de comida entre aquellas personas más necesitadas o en riesgo de exclusión. Precisamente esta labor solidaria les ha hecho benefactores de la primera edición del Premio Reyes Magos del Bierzo, creado por la asociación ecologista Bierzo Natura para reconocer la labor de todas esas personas o colectivos que fomentan la solidaridad y la integración social en unos tiempos -”los actuales-” especialmente complicados.
Los últimos datos del paro reflejan que el año 2010 no ha empezado muy bien en la comarca, de hecho, 11.738 personas están sin trabajo. A estas y a otras muchas ayuda el Banco de Alimentos del Sil y de ahí que Bierzo Natura haya considerado obligatorio otorgar su premio a la citada oenegé. Su presidente, Damián Tascón, se ha mostrado agradecido y ha reconocido como crucial la labor que llevan a cabo todos los voluntarios, dado que sin su ayuda sería imposible desempeñar la función para la que el colectivo se creó hace ya trece años.
«Los valores en los que nos hemos fijado para entregar este premio han sido la solidaridad humana, la transparencia con la que se hace todo, la vocación de servicio y la eficacia de su actuación», aseguró uno de los miembros de Bierzo Natura, Marcelino Tabuada.
El éxito del Banco de Alimentos radica en la movilización. A lo largo de su historia ha sido capaz de implicar en su causa a administraciones públicas, empresas privadas y diferentes colectivos o asociaciones. Para ello basta con recordar su última campaña navideña, en la que participaron desde centros escolares de toda la comarca, hasta entidades bancarias como La Caixa, pasando por el propio Hospital del Bierzo.
A día de hoy, los más de treinta voluntarios de esta oenegé en el Bierzo orientan y ayudan de forma continuada a más de 300 familias, no sólo bercianos, sino también a gran cantidad de inmigrantes que ahora se encuentran con problemas de trabajo a causa de la crisis. Un labor digna de los reyes más magos, la de multiplicar los alimentos -”que no los panes y los peces-” con el trabajo y la dedicación de personas de a pie.