Morala exige más debate sobre las alegaciones al TUP

El portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala, aseguró ayer que comparte algunas de las críticas al actual proyecto del TUP que expresan las alegaciones de los representantes de los trabajadores y de Confebus. «No se trata de una oposición política, sino de preocupaciones muy fundadas de los trabajadores, quienes dedican su vida a trabajar en nuestro transporte urbano y son los verdaderos expertos en el transporte urbano y la movilidad de Ponferrada; y también son preocupaciones de la propia Confederación Española de Transporte en Autobús, que algo sabrá de esto y ha diseccionado concienzudamente muchos inconvenientes del proyecto del Ayuntamiento».

En un comunicado y después de que el equipo de Olegario Ramón vaya a llevar al Pleno municipal de mañana viernes las alegaciones al expediente sobre la forma de gestión del servicio público de transporte urbano de Ponferrada, Morala insiste en que «varias de esas alegaciones inciden en cuestiones que este Grupo Municipal Popular ha venido señalando a lo largo de este mandato. Basta ver nuestras palabras en el pleno del 29 de noviembre pasado para percibir que la preocupación que expresamos entonces no solamente no se ha disipado por la acción del equipo de gobierno, sino que se ha incrementado. Este es un problema que se arrastra desde hace demasiados años como para que se le dé una mala y precipitada respuesta, dejando aspectos claves sin contemplar o resolver».

«No se trata únicamente de cuestiones relativas al cálculo poco realista de los costes (las alegaciones de los representantes de los trabajadores son muy elocuentes en un aspecto clave como la subrogación, las de Confebus alcanzan incluso a cuestiones tributarias), lo que puede comprometer gravemente la sostenibilidad futura del servicio de transporte urbano ponferradino, sino de un cúmulo de cuestiones complejas sobre la eficiencia del servicio y la idoneidad del procedimiento seguido», explica.

Para Morala, el primer inconveniente para un análisis pausado de las alegaciones es que difícilmente el tiempo existente en un pleno permita un debate con la profundidad que la importancia de este servicio requiere. «La contestación adelantada en la Comisión quiere diluir todas las alegaciones en aspectos técnicos, pero quienes representamos a los ciudadanos estamos obligados a sopesar cuestiones que van más allá dentro de lo que es técnica y jurídicamente posible, si no, no habría diferentes opiniones políticas sobre el transporte urbano, su calidad, sus sostenibilidad, las mejores condiciones de prestación, las condiciones laborales de los trabajadores y sobre la movilidad que las personas de Ponferrada merecen. Y en esas cuestiones ni entran los informes técnicos municipales ni se han disipado las dudas que ya expresábamos hace meses», insiste en el comunicado el PP.