Los municipios del Bierzo dejan de gastar más de 620.000 € en fiestas

A las puertas de La Encina y después de un verano sin fiestas no sólo en el Bierzo sino en toda España, los ayuntamientos de la comarca empiezan a hacer balance. Hasta ahora han dejado de gastar más de 621.000 euros que, en su gran mayoría, se destinarán a ayudas e iniciativas sociales.

El Ayuntamiento de Ponferrada, el más grande en población de la comarca, tiene en sus arcas del capítulo de fiestas unos 150.000 euros. Ese dinero, según fuentes del equipo de gobierno de Olegario Ramón, se destinará, después de las correspondientes modificaciones de crédito, a partidas relacionadas con situaciones de urgencia y gastos extraordinarios relacionados con la pandemia del Covid-19.

Fabero es, en este sentido, el municipio de la comarca que más dinero ha detraído de la partida de fiestas. Según su alcaldesa, Mari Paz Martínez, parte ya tiene destino: 70.000 para contrataciones de trabajadores que palíen a su vez la pérdida de puestos de trabajo en la zona; 14.000 para la digitalización del comercio en la villa; 30.000 para los autónomos y el resto se distribuye en partidas como ayudas a la compra de libros escolares y otros apartados sociales. Además de las fiestas, que incluían ayudas a todas las pedanías, también se ha suspendido el encuentro de pintura que convertía a Fabero en foco de atención a nivel nacional.

Cacabelos, otro municipio berciano con gran tradición festiva, ha dejado de gastar entre 80.000 y 100.000 euros de un programa que incluía Pascua, San Isidro, San Roque, la feria del vino y el 1 de Mayo, más todo el programa del verano. De momento, el equipo de gobierno que preside Júnior Rodríguez no ha decidido el destino de todo el dinero, aunque será para gastos sociales en los próximos meses. En Toral de los Vados han sido casi 40.000 euros e incluyen el dinero que iba a actividades culturales y deportivas. Según su alcalde, Pedro Fernández, parte importante de ese dinero se destinará a obras en los colegios y en el consultorio médico, aparte de otras partidas destinadas a acciones sociales.

Bembibre suspendió de forma oficial las fiestas del Cristo, si bien ha contemplado una programación que «cumpliendo todas las normas de seguridad sanitaria rinda un pequeño homenaje a las fiestas locales». Aún así, la suspensión de actividades como los fuegos artificiales, otros conciertos, competiciones o el pregón le supone al Ayuntamiento un «ahorro» de 62.000 euros, fondos que, según confirmaba la alcaldesa, Silvia Cao, «se destinarán a las ayudas al comercio local en parte y el resto se derivará a la Concejalía de Acción social». Por su parte la responsable de Fiestas y Comercio, Belén Martín, señala que aún no se puede detallar el reparto exacto de la cuantía «porque todavía se estudian las solicitudes de ayuda a los comerciantes —se fijaron 350 euros por negocio que cumpliera las condiciones establecidas para las ayudas—.

Torre del Bierzo también suspendió las fiestas patronales en honor a San Roque que deberían haberse celebrado el 16 de agosto, y eso supuso una bolsa de remanentes de en torno a los 29.000 euros. Esos fondos se destinarán, confirmaba el alcalde, Gabriel Folgado, «a invertir en actuaciones públicas en función de las necesidades».

Villafranca también estudia la partida y su destino, según fuentes municipales.

Molinaseca ha dejado de gastar unos 60.000 euros que el Ayuntamiento ha reconvertido en bonificaciones para empresarios y autónomos del municipio con la exención de tasas municipales durante 2020 (agua, alcantarillado, ocupación de vía pública...).