Ponferrada activa el primer punto de recarga eléctrica del Camino
Dirigido a peregrinos con movilidad reducida o bicicletas eléctricas.
Un vehículo eléctrico utiliza el nuevo punto de recarga. L. DE LA MATA
maría carro | ponferrada
La Fundación San Valero, de carácter educativo y asentada en Zaragoza, inauguró ayer en Ponferrada el primer punto de carga de vehículos eléctricos del Camino de Santiago. Un proyecto dirigido a fomentar el respeto al medio ambiente dentro de la propia Ruta Jacobea y enmarcado en el Life Star +20 cofinanciado por la Unión Europea. El nuevo punto de recargar pensado principalmente para peregrinos con movilidad reducida, aquellos que hacen el Camino en bicicleta eléctrica o quienes utilizan ciclomotores eléctricos —una opción cada vez más asentada— está ubicado en el albergue de peregrinos Nicolás de Flüe.
Que sea un albergue de grandes dimensiones, que esté ubicado justamente a 200 kilómetros de Santiago y, por ello, muchos peregrinos señalen Ponferrada como punto de partida, su modelo de gestión y el contenido han sido factores determinantes a la hora de elegir el albergue ponferradino para le instalación de este punto de recarga. Es el primero de cinco que se instalarán en todo el Camino de Santiago —uno por cada comunidad autonóma que atraviesa la ruta hasta Galicia— y será el único de toda Castilla y León.
El proyecto global de sostenibilidad ambiental en la Ruta Jacobea lleva consigo un presupuesto de 1,7 millones de euros, de los que el 50% lo financia la Unión Europea y de la mitad restante se encargan los socios participantes en el Life Star +20, entre ellos la ya mencionada Fundación San Valero. Fue precisamente el director general de esta entidad, César Romero, el encargado de inaugurar ayer una instalación que, en el caso concreto de Ponferrada, ha supuesto un desembolso de unos 3.000 euros. Una cantidad quizás no muy elevada pero —afirmó Romero— no es tanto la inversión como el ejemplo que con ello pretendemos dar.
«Lo que pretendemos es potenciar en el Camino el componente de sensibilidad medioambiental, por se hace desde muchos enfoques (cultural, deportivo, religioso) pero el aspecto medioambiental no está integrado en el Camino», explicó el director de San Valero, que estuvo acompañado del concejal de Movilidad, Ricardo Miranda.