Diario de León

Ponferrada liquida el Imfe entre dudas legales de la oposición y críticas por su coste final

El equipo de gobierno calcula el ahorro en 94.000 euros y varios grupos coinciden en que «es por motivos ideológicos»

Ponferrada

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Los tres partidos que conforman el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ponferrada —PSOE, Podemos y CB— hicieron ayer una férrea defensa de la disolución del Instituto Municipal para la Formación y el Empleo (Imfe) frente a una oposición que cuestionó su legalidad y denunció que, al final, la gestión costará más a las arcas municipales que los 207.000 euros actuales.

En el Pleno que ayer trató el asunto, la presidenta del organismo y concejala de Hacienda, Mabel Fernández, cifró en 94.000 euros el ahorro para el Ayuntamiento de una medida que se ha tomado, según explicó, por motivos de eficacia, y que ahora asumirá la Oficina Municipal de Desarrollo Económico. De todas formas, el alcalde, Olegario Ramón, añadió en su intervención final que también son ideológicos por la visión que tiene su partido de la gestión de lo público. El Imfe se suma así a otros organismos disueltos en el último año como Pongesur y los Patronatos de Turismo y Deportes. Tras la aprobación en Pleno, se abre ahora un plazo de alegaciones de 30 días.

El punto salió adelante con el voto a favor del gobierno municipal y el no del resto en un debate en el que no sólo hizo de portavoz de la medida Mabel Fernández sino también los representantes de Podemos y Coalición.

Ambos reafirmaron los argumentos. Lorena González aplaudió que «regenera lo público» en el Ayuntamiento y por el ahorro económico que implica e Iván Alonso porque los planes de empleo también se gestionan en otras administraciones con un modelo público, como en el Consejo Comarcal. «Lo aplaudimos y lo apoyamos».

El portavoz del PP, Marco Morala, aseguró que la disolución del Imfe responde a criterios ideológicos que, «cueste lo que cueste», van a pagar los ciudadanos de Ponferrada. «En vez de aprovecharlo y moldearlo, se elimina un organismo necesario», criticó Morala, que cuestionó la forma en la que entrarán a formar parte de la plantilla municipal los tres trabajadores actuales, sin los preceptos de publicidad, mérito y capacidad de toda plaza pública. «No es en contra de los trabajadores actuales, pero se meten trabajadores por la puerta de atrás», dijo. Morala también añadió que va a costar más su gestión y que se restan controles a la oposición.

El portavoz del PRB, Tarsicio Carballo, que había abierto el turno de la oposición, calificó la disolución como un error ya que todos los grandes ayuntamientos tienen este tipo de «organismos auxiliares» para su gestión y aventuró que al final «va a salir más caro» al Ayuntamiento.

Samuel Folgueral rechazó también la medida. En su opinión, el empleo es hoy, más que nunca, «un artículo de primera necesidad», y aventuró que su gestión por el Ayuntamiento va a conllevar un mayor coste. «Se disuelve por voluntad política», dijo.

Especialmente dura en su argumentación fue la portavoz de Cs , Ruth Morales, que era hasta ayer también vicepresidenta del Imfe. Tras criticar la escasa información facilitada por el equipo de gobierno, denunció que la medida sólo pretende «anular a la oposición allá donde esté». «Es imprudente en un momento delicado como éste y puramente política porque no tiene nada que ver con la gestión, además de rozar la legalidad». A la vista de la documentación que ayer se vio en el Pleno, Morales advirtió de la falta de informes de las administraciones superiores que tienen, o tienen delegadas, las competencias en empleo, lo que le llevó a decir que era una «chapuza» y un «despropósito jurídico».

Ramón afeó a PP y CS que critiquen la medida cuando la anterior presidenta del Imfe, Rosa Luna, ahora en el Grupo Popular, también lo quería eliminar. «Ahí sí que hay un conflicto de coherencia», dijo Ramón a Morala.

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