Diario de León
Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Hace unas tres décadas, cuando todavía las tortas no estaban prohibidas, un alumno fue enviado al despacho del director tras recibir una. Una sonora bofetada!. Un profesor le dio un tortazo, por su mala conducta y por su respuesta después de ser amonestado. Antes de aplicarle un castigo, los profesores quisieron escucharlo: «Reconoció que se había pasado y pidió perdón. La crítica a la violencia del profesor apenas se notó en su explicación final. Y en ningún momento se mostró arrogante». Al profesorado no le costó mucho emitir una sentencia absolutoria. El alumno no fue castigado. He recuperado este recuerdo tras escuchar el alegato final de los presos catalanes: «Autocrítica o arrepentimiento, cero. Toda la culpa, del estado. Altivez, o arrogancia, sin disimular».

tracking