El Archivo de León rescata a 28.617 presos
Villahierro custodiaba hasta ahora los expedientes carcelarios de los republicanos y las ejecuciones a garrote vil de 397 internos
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El 6 de septiembre de 1939 Sócrates Gómez Jareño fue «pasado por las armas» —que suena mejor que ejecutado—. Había sido detenido seis meses antes. Herrero de profesión, natural de Consuegra y afincado en León, fue condenado por participar en el sabotaje al aeródromo de la Virgen del Camino. Tenía solo 38 años. Su expediente, junto al de otros 28.616 presos, está ahora en poder del Archivo Provincial de León, en el mismo edificio donde cumplieron condena miles de esos internos, algunos finalmente fusilados. Sócrates era hijo de Tomás y Felipa, sabe leer y escribir, es católico, vecino del barrio de La Sal, está casado y no tiene hijos, según su ‘ficha’. El 11 de agosto es sometido a un consejo de guerra que se celebra en la Diputación de León. El juez instructor es el teniente coronel Francisco Arranz.
El centro penitenciario de Villahierro custodiaba su historia hasta hace dos meses. Una historia que abarca desde 1920 hasta 1969 y ocupa más de 62 metros lineales de estantería. La prisión de Mansilla de las Mulas había creado una base de datos con toda esta ingente documentación, que ahora ha revisado y ampliado el Archivo Histórico Provincial, donde será más accesible para las consultas de familiares e investigadores. Eva Merino, directora del Archivo Histórico, recuerda que todos los expedientes que han recibido de Villahierro son de consulta pública, por su cronología, tal y como contempla la ley, al haber pasado más de 52 años desde la excarcelación.
Eduardo Pallarés Berjón, farmacéutico de 48 años, ingresa en Puerta Castillo procedente del campo de concentración de San Marcos. Es uno de los numerosos intelectuales que fueron detenidos en los primeros meses de la Guerra Civil por «provocación a la rebelión». El 9 de mayo de 1938 es condenado por el Juzgado Militar de León.
Baltasar del Palacio García, de 30 años, casado y con dos hijos, también es enviado a prisión en concepto de «detenido», tras haber estado recluido durante varios meses en San Marcos. Solo pasará en la cárcel entre abril y agosto del 37. Es puesto en libertad sin ser juzgado «por hallarse padeciendo tuberculosis pulmonar». Morirá apenas pasados dos meses.
Emilia Gómez González entra en prisión embarazada. En 1945, tras dar a luz, es ejecutada.
De los 26.617 expedientes carcelarios contabilizados entre 1920 y 1969, 12.205 se refieren a personas que ingresan en los años de la Guerra Civil, lo que da idea de la represión franquista que sufrió esta provincia.
También resulta aterrador que entre 1936 y 1963 fueron ejecutados a garrote vil 397 presos y presas, con un llamativo ‘pico’ en 1938. En ninguna ficha se cita el nombre del verdugo. Eva Merino aclara que «muchos de ellos no permanecían en prisión ni siquiera 24 horas, sino que eran enviados del campo de concentración de San Marcos o del Tribunal Militar de la Plaza para ser recogidos por el piquete de la Prisión Provincial».
Los expedientes carcelarios del colosal archivo que ahora están ‘enjaulados’ en el Castillo de León proceden de nueve centros penitenciarios de la provincia: Prisión Provincial de León, Prisión Central de Astorga —con 12.124 expedientes entre 1931 y 1969—, Prisión del Partido de Astorga, y las prisiones de los partidos de La Bañeza, Ponferrada, Valencia de Don Juan y Villafranca del Bierzo, así como las prisiones preventivas de La Vecilla y Riaño.