Ármaga llena de arte el suelo de San Marcelo
Un tapiz de Amancio González o alfombras de Pérez Rivera, Colinas y Tranche. El arte que llega vía Ármaga busca la propuesta original en un soporte presente en lo cotidiano. El tufting llega así a San Marcelo hasta el 15 de enero.
Begoña Pérez Rivera, delante de una de sus dos creaciones. F. O.
Ármaga propone ahora Arte para pisar porque hace tiempo que Marga Carnero, su alma mater, decidió que lo estático de la obra de arte no está reñido con la dinámica de la imaginación. Por eso se embarca en proyectos llenos de diversidad, tanto desde la estética como desde una filosofía en la que lo más recomendable es mezclar el arte con la vida, porque suelen caminar juntos. Incluso, en esta ocasión, Arte para pisar sale caminando desde la galería, en Alfonso V, hasta el Museo de Las Tierras de León, instalado en el Centro de Cultura Tradicional situado en la planta sótano del viejo Ayuntamiento de León en la Plaza de San Marcelo. Y si este arte se pisa, será que son alfombras las que se exponen dentro del conjunto de la muestra permanente.
David Colinas fue el agitador de esta idea. Porque además de haberla desarrollado en otras ocasiones, tal y como indicaba en la presentación de ayer, sentía que aún había cosas por hacer. Y así es como se suman más artistas leoneses de trayectoria como son Begoña Pérez Rivera, Esteban Tranche y Amancio González.
En esta exposición presentan sus trabajos textiles, alfombras realizadas con la técnica tufting y lana de Nueva Zelanda.
El Tufting es una técnica de creación de alfombras en el que unos hilos se inyectan con una pistola a una tela base materializando las obras de los artistas en piezas únicas. El Museo de Las Tierras de León contiene la colección de Javier Emperador de Indumentaria Tradicional. Lugar idóneo para dialogar el textil contemporáneo de los artistas con la indumentaria del pasado. La exposición se completa también con otros trabajos de los artistas. Begoña Pérez, una artista multidisciplinar que se mueve con soltura tanto en la pintura como en la escultura o en el ámbito de la instalación. Esteban Tranche es pintor, escultor y grabador. Su obra es tan personal que todo lo que haya aprehendido en el camino ha sido tamizado por su personal manera de representar las formas y colores. David Colinas, su obra recrea un mundo propio que invita al espectador a penetrar en su aparente desorden para encontrar la belleza y la ternura que esconde.
La obra de Amancio González, lejos del frío y repetitivo academicismo, nos ofrece una perspectiva diferente utilizando siempre la figura humana, en ocasiones metamorfoseada, pero siempre el hombre presente.
Cada artista presenta, en lo que a las alfombras se refiere, al menos dos propuestas. Y de momento como piezas únicas, aunque quién sabe si el proyecto crecerá y se hagan reproducciones. Por esa exclusividad, el precio de las piezas, que están a la venta, puede superar los 2.000 euros.
Colinas contaba ayer que Pedro peña desde Madrid es el que las ha fabricado. Y aquí surgen una conexión leonesa, puesto que es el mismo que fabricó las que hizo Paco Chamorro para Botines.
Amancio González explicó que llevaba tiempo intentando pasar la línea del lápiz a otros soportes y, en este caso, experimentar más desde lo industrial. Aunque la huella de Amancio, aunque sea un tapiz, es la que prevalece.