Diario de León

El bar Elvis de La Bañeza: un homenaje de 35 años a «El Rey»

El local lleva 26 años organizando un concierto que lidera la voz de Javier Arias

Javier Turrado, dueño del Bar Elvis, y el cantante leonés Javier Arias. DANIEL PISABARRO

Javier Turrado, dueño del Bar Elvis, y el cantante leonés Javier Arias. DANIEL PISABARRO

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Quizás Elvis no murió del todo aquel 16 de agosto de 1977. Hay millones de razones, homenajes y personas, alrededor de todo el mundo, que dan fe de que, su legado y persona, aún viven.

En La Bañeza existe, desde hace 35 años, un lugar donde «El Rey», Elvis Aaron Presley, está más que presente. Un lugar, donde su música es la banda sonora del día a día para todo aquel que allí se acerque. Un lugar pequeño, quizás muy pequeño, apenas 9 metros de largo por 5 de ancho. Pero el tamaño no importa cuando se trata de medir sueños. Ese lugar era el sueño de un joven muchacho de 23 años, y ese lugar, sigue siendo su sueño; un sueño ahora ya cumplido. Me quiero imaginar, como si de una escena de película se tratase, a ese joven en aquel ya lejano 1987, quitando un par de posters que en su habitación tenía de su ídolo de Tupelo, para decorar la pared de su recién adquirido bar. Ese lugar, ese mágico lugar, es el Bar Elvis; y ese joven, que aún lo sigue siendo, es Javier Turrado «Javi». El resto ya es, y forma parte de la historia. Una historia, no sólo de este mítico bar bañezano, sino de todas las generaciones que por él hemos ido pasando. Yo empecé a frecuentarlo con apenas 14 años, y ahora con 44 sé que, gran parte de mi educación musical, se la debo a Javi y a ese Rock & Roll , que entre sus paredes nunca ha dejado de sonar. Eso es algo impagable. Algo que encierra dentro de si una magia muy especial. Porque en estos tiempos en los que somos tan dependientes de la tecnología y tan sufridores del omnipresente reggaeton, algo mágico deben tener tanto Javi, como su Bar Elvis, como esa música que nos regala, para que esta nueva generación y chavalería de 18 años, llene su terraza cada día, en verano y en invierno. La razón es sencilla, el Rock, al igual que los sueños, son jóvenes; y nunca morirán. Por eso, es algo maravilloso ver cómo en este bar, las viejas y nuevas generaciones se mezclan y disfrutan. Y todo ello, bajo la atenta mirada de Elvis, que observa, seguro que feliz, desde los innumerables posters y fotografías, que de él, cubren las paredes del bar.

Pero de entre todos los momentos del año hay uno que define, mejor que mil palabras, lo que, humildemente, quisiera explicaros. Cada 16 de agosto, ya en la madrugada del 17, se celebra desde hace 23 años, a la puerta del bar, un concierto homenaje a «El Rey». Un concierto que congrega a un gran número de público, una «gran familia»; que, año tras año, acude fiel a esta singular cita. Llegan desde las cuatro esquinas de este país, y en esta ocasión, hasta de Argentina. Si algo tienen las «familias», es que, una vez te han aceptado como uno de ellos, lo serás para siempre. Y eso es lo que ocurre con el gran músico y crooner leonés Javier Arias. Javier Arias ha sido, es y será, el encargado (desde ese primer concierto homenaje, hace 23 años) de ser el corazón de esta celebración, convirtiéndose en Elvis cada madrugada del 16 al 17 de agosto. Pero no en un Elvis cualquiera, para la «gran familia» del Bar Elvis, Arias es «nuestro Elvis», y eso… eso es mucho. Con su increíble voz, pero sobre todo con su sensibilidad, carisma y humor, Javier Arias se ha ganado los corazones de un público bañezano y foráneo, que año tras año sabe que las fiestas de La Bañeza no acaban, hasta que suenan los últimos acordes de Can´t help falling in love , tema con el que el último bis y concierto terminan.

Arias comenzó este año el concierto pidiéndonos una cosa, «imaginar que Elvis no murió ese día, imaginar que se cansó de todo este mundo de éxito y glamour , que se retiró y que sólo se dedicó a cantar aquellas canciones que le gustaban y apetecían de verdad». Es una petición muy sencilla, porque cada agosto en La Bañeza, a la puerta del Bar Elvis, fruto de un sueño, el sueño de un joven Javier Turrado, que lo apostó todo para conseguirlo, Elvis se hace presente de verdad. Porque efectivamente «El Rey» no ha muerto, vive en este bar y en el corazón de todas aquellas personas que quieran conocerlo; y una vez que lo haces… «la fuerza siempre te acompaña».

tracking