El CEL analiza las expectativas de la Cultura, que aporta el 3,2% a la economía leonesa
El Círculo Empresarial Leonés(CEL) celebró ayer la décima jornada online en abierto, desde FB Live y Youtube, centrada en analizar la situación y expectativas del sector empresarial vinculado a la cultura, que contribuye con un 3,2% al PIB provincial. Una enriquecedora sesión que contó con la participación de cinco invitados, del sector privado y público, que realizaron una radiografía de cómo está el sector de la cultura y de las artes escénicas, en particular, y cuáles son sus necesidades y propuestas para la vuelta a una cierta normalidad en la etapa post Covid.
Los protagonistas del debate fueron Javier Cambero (Eje Producciones Culturales); Enrique López (Centro Dramático Leonés); y Eva García (Teatro Diadres); y dos directivos de instituciones públicas: José Ramón García, director general de Políticas Culturales de la Junta de Castilla y León, y Emilio Gancedo, coordinador del Instituto Leonés de Cultura de la Diputación de León.
José Ramón García destacó el momento delicado y la «situación catastrófica» del conjunto del sector cultural ante el parón forzado por la pandemia, sector que arrastraba las secuelas de la anterior crisis, con un reflejo en la reducción del presupuesto que pasó de 250 millones de euros en 2007 a los 123 millones actuales. García destacó que el objetivo del Plan de Reactivación que ha puesto en marcha la Junta de Castilla y León es «que sobreviva el tejido cultural de la Comunidad con el apoyo de la administración».
Enrique López, destacó la situación «terrible, de parón total» tanto de las compañías de servicios artísticos como técnicos y realizó un perfil empresarial del sector, muy atomizado, de pequeñas empresas, cooperativas y autónomos, de los que un 60% no han percibido las prestaciones de los Erte.
Cambero reclamó la revisión del IVA de las actividades culturales del 21%, cuando en otros países europeos es el 4% o el 7%.
Eva García confía en que se puede volver a empezar. Y Gancedo destacó la capacidad de resistencia del sector cultural en un momento «tremendamente inusual».