El ILC datará la calzada de Palacios

Palacios de la Valduerna tiemucha historia y medio kilómetro que encierra un secreto antiguo que ahora, el Ayuntamiento dirigido por Maximina Domínguez quiere desentrañar. Es la calzada que surge en el pueblo y muere en ese cruce de caminos y autopistas que el mundo actual modificó como paisaje. Por eso, un paseo junto a la alcaldesa y el arquitecto del municipio, Carlos Anta, resulta toda una sesión didáctica al aire libre sobre un tramo de la Vía de la Plata que sorprendentemente ha resistido la modernidad y se conserva como un camino elevado, un puente romano y a simple vista todo un alarde antepasado sea romano, visigodo o más reciente.

El Ayuntamiento de Palacios de la Valduerna aspirará a la línea de ayudas del ILC. Y, por eso, advierten: «Nosotros solo tenemos claro que es un resto de la historia de este pueblo. La Diputación es la que tiene que determinar el valor histórico y época. El puente, por el que pasa el río Peces, sí está catálogado como BIC (Bien de Interés Cultural) como puente romano», relata Anta, además de consideraciones de importancia acerca de las peculiaridades de un tramo que sorprendentemente ha resistido durante siglos a la acción y desarrollo urbanístico de la propia localidad como en el conjunto de las infraestructuras provinciales.

Para que este espacio, que ahora mismo tendría ya suficiente valor como lugar en el que disfrutar de cómo en tiempo muy atrás se acometió la creación de un paso teniendo en cuenta el discurso del río como las riadas, hay que esperar por un lado a la decisión burocrática provincial y que se despierte el interés por saber de qué carácter es la calzada, y si todo discurre de manera positiva que se reciba la ayuda económica para su puesta en valor, adecentamiento de la zona y mejora de determinados puntos deteriorados por el uso y por el propio desgaste del tiempo.

De todas formas, la alcaldesa de Palacios tiene claro el valor de siempre para el municipio como un privilegiado espacio.