La clásica se enseña en León

daniel garcía | león

Un año más la fundación Eutherpe sigue con su empeño de convertir a la ciudad de León en la meca de la música clásica. En este caso, con el curso para jóvenes pianistas y directores de orquesta. El auditorio Ciudad de León será la sede de este curso hasta el próximo diez de septiembre, con sendos conciertos en abierto los días 8 y 9 de septiembre a las 20.30 horas que servirán de colofón para la decimocuarta edición del curso.

«Estamos encantados de realizar este curso desde 2004, algo que no es nada fácil», comentó Margarita Morais, directora de la fundación Eutherpe, durante el acto de presentación del curso.

En el mismo acto también estaban presentes el concejal de educación Javier García Prieto, concejal de educación; los directores Bruno Aprea y Joaquín Soriano; Pablo Andoni, alumno de dirección; Álvaro Martín del Burgo, alumno, pianista y escritor; y Francisco Valero, director de la Joven Orquesta de León (JOL).

Durante el curso se recitarán obras de Beethoven , Liszt, Schuman y Rajmáninov. Un última composición del director ruso, una de las más «difíciles» de tocar, según la directora de la fundación

«Para mi es un gran placer, cada año el nivel es superior, estoy muy satisfecho»,recalcó el afamado director italiano Bruno Aprea, señalando a la ciudad de León como la principal «referencia» musical de Europa en estos momentos.

«Yo creo que en Europa no hay ningún curso así como este» explicó Joaquín Soriano, pianista y maestro en este curso de la fundación Eutherpe. El músico leonés también hizo hincapié en la forma en la que puede sacar lo mejor de un alumno: «Lo importante es meterse en la personalidad del alumno, y sacarle lo que a veces el no sabe que tiene».

El hecho de que algunos alumnos repitan este año, quiere decir que las cosas se están haciendo bien. Este es el caso de Álvaro Martín del Burgo, pianista y Pablo Andoni, alumno de dirección, los cuáles repiten por tercera y quinta vez respectivamente. «En este curso se prende mas que en un año» comentó el joven pianista sobre un curso en el que no solo tiene un crecimiento musical, si no también «espiritual», ya que desde su punto de vista «es una labor que se hace en común, que une mucho, en la que hay que unirse en ese esfuerzo de hacerse uno con la música».

Por su parte el director de la joven orquesta de León, Francisco Valero destacó «la prueba de toque» que es para la su orquesta este curso y los dos conciertos en abierto que ofrecerá al público. Sobre el curso, el director valenciano quiso destacar el «reconocimiento internacional» que ha ido cogiendo con el paso de los años tanto nacional como internacionalmente. Algo que ve posible gracias a ciudad de León. «Sin la delicadeza y sin la gentileza tanto de las gentes como de las instituciones de León este curso no podrida hacerse en cualquier otra parte del mundo».

El resto de los presentes también quisieron recalcar la importancia de la labor de Margarita Morais, sin la que sería «imposible» realizar todo este tipo de eventos, según Pablo Andoni, alumno de dirección de orquesta en dicho curso durante los últimos cinco años.