Diario de León

CULTURA ■ MÚSICA

‘Tosca’, la ópera en la que matan más que cantan, en león

Ópera 2001 pone en escena en el Auditorio a más de un centenar de artistas

Una escena de 'Tosca', una de las óperas más famosas de Puccini, que esta noche llega al Auditorio Ciudad de León.

Una escena de 'Tosca', una de las óperas más famosas de Puccini, que esta noche llega al Auditorio Ciudad de León.

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León

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Lugar: Auditorio Ciudad de León.

Hora: 21.00.

Entradas: 28 y 34 euros.

VERÓNICA VIÑAS | LEÓN

Mahler odiaba Tosca porque decía que había demasiada sangre en escena. Ópera 2001 regresa al Auditorio Ciudad de León con la ópera de Puccini que ya representó en este mismo escenario en 2011 y en 2005 en el Teatro Emperador.

Tosca es una tragedia en tres actos en la que Puccini aborda temas como la violencia —hay varios muertos—, abuso de poder, luchas políticas, pasiones, torturas y sexo.

Cuando Puccini estrenó Tosca en 1900 en Roma, la representación tuvo que retrasarse por una amenaza de bomba que obligó a desalojar el teatro. Salvo la fría noche del estreno, Tosca ha acabado encumbrándose como la obra maestra de un compositor cuya inspiración también produjo grandes leyendas del género lírico como Madama Butterfly, La Bohème Manon Lescaut o Turandot. El argumento de Tosca es un drama que mezcla amor, celos y política, con un trasfondo histórico verídico, la Europa de 1800, en medio de la invasión de Napoleón a Italia. Cavaradossi es un pintor romano amante de la cantante Floria Tosca y de ideas revolucionarias. El barón Scarpia es el jefe de la policía real romana, hombre de mala vida que desea a Tosca y odia a tipos como Cavaradossi. El argumento es tremendamente enrevesado y al final muere hasta el apuntador: Scarpia cae asesinado, Cavaradossi es fusilado y Tosca se suicida.

Tosca, que contiene todos los ingredientes de un auténtico thriller, se adelantó a su época y es, de todas las óperas de Puccini, la que suscita más ardor entre defensores y detractores. La crítica fue unánime al condenar la obra de Puccini y el mismísimo Claude Debussy la despreció. Hizo falta medio siglo para que Tosca, amada inmediatamente por el público, lograra también imponerse entre los propios músicos.

La alicantina Ópera 2001, en esta ocasión de la mano de la Cope, es una de las escasas compañías que suele incluir en sus giras a León, una ciudad donde el género lírico se sirve a cuentagotas. Tosca desplegará sobre el escenario del Auditorio a más de un centenar de artistas, incluidos los miembros de la orquesta, los coros y solistas. La escenografía corre a cargo de Alfredo Troisi y la dirección musical de Martin Mázik. La representación contará con subtítulos en castellano.

En esta producción destaca la participación de cantantes con una destacada trayectoria internacional como el tenor David Baños (Mario Cavaradossi); el barítono Paolo Ruggiero (el barón Scarpia); y Melanie Naussay, en el papel de la bella Tosca.

Tosca se ha ganado su propia leyenda negra. Los supersticiosos dicen que es una obra que da mal fario. Puccini se enamoró de la versión teatral de Tosca, de Victorien Sardou, cuando la vio en Milán, con la célebre actriz Sarah Bernhardt en el papel protagonista. También fascinó a Verdi, aunque no compuso finalmente una ópera porque no le gustaba el desenlace.

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