Diario de León

El Renacimiento leonés regresa a las subastas

Discípulos y profetas. La firma catalana La Suite Subastas pone a la venta mañana dos obras del Renacimiento leonés. Las tablas de ‘San Matías’ y ‘Rey David’, pertenecientes a sendos retablos, están atribuidas al Maestro de Palanquinos y al Maestro de Astorga.

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Los especialistas no han podido ‘desenmascarar’ a los artistas conocidos como Maestro de Palanquinos (activo en León entre 1470- 1500) y el Maestro de Astorga (activo en 1500 en Astorga-documentado en 1530). Lo que ninguno pone en duda es la calidad de sus obras. Mañana, La Suite Subastas pone a la venta un San Matías —temple y fondo de oro sobre tabla de 69,5 por 51 centímetros—, por un precio estimado entre los 10.000 y 15.000 euros.

El profesor Chandler Post la atribuyó al Maestro de Palanquinos —contemporáneo de Da Vinci— y perteneciente a la antigua colección de Álvaro de Retana y Gamboa. En los últimos años, el profesor Marc Ballesté, en su tesis, centrada en las obras de las diócesis de León y Astorga, asegura que esta pintura es obra de un artista cercano al Maestro de Palanquinos y seguramente activo en la misma zona geográfica, por tanto, León.

Desde hace años se sabe que la obra de Palanquinos es en realidad un obrador con centro en León y distribución en toda la diócesis, así como en las vecinas Astorga, Zamora y Palencia.

Las obras

Las dos tablas que se subastan mañana tienen un precio estimado de 15.000 y 7.500 euros

La misma firma catalana subasta también mañana una témpera sobre madera que representa al Rey David y conserva la crestería en madera tallada y dorada original. Mide 104,5 por 23,5 centímetros y es uno de los profetas procedentes del guardapolvo del retablo mayor de San Esteban, realizado para la iglesia parroquial de Fuentelcarnero, cuya autoría se debe a tres artistas seguidores del Maestro de Astorga, según el experto Marc Ballesté. Esta obra tiene un precio estimado entre los 6.000 y 7.500 euros. Otros autores como Isabel Mateo mantienen la tesis de que es obra de un único artista, el Maestro de Astorga.

El historiador Gómez Moreno fue el primero en bautizar en 1908 como Maestro de Palanquinos al autor de seis tablas localizadas en la parroquia de dicha localidad, que en la actualidad se encuentran junto a las de Nicolás Francés en el retablo mayor de la Catedral de León.

Un artista con varias identidades

El Maestro de Palanquinos está considerado como el exponente más valioso del influjo flamenco en León. En 1998 Javier González Santos desveló la identidad del escurridizo Maestro de Palanquinos: Pedro de Mayorga, un artista leonés que realizó las pinturas del primer retablo mayor que tuvo la basílica de Oviedo, sustituido en 1512 por el actual.

A partir de una tabla de este retablo González Santos pudo relacionar al llamado Maestro de Palanquinos con Pedro de Mayorga, documentado en León. Ballesté va un paso más allá. Algunas obras del Maestro de Palanquinos serían obra del Maestro de Santiago y en otras, como el retablo de Santa Marina —hoy conservado en el Museo de Bellas Artes de Asturias y proveniente de la iglesia de Santa Marina de Mayorga de Campos—, habría intervenido una ‘segunda mano’, que el investigador catalán ha denominado ya como el Maestro del retablo de Santa Marina. Así pues, hubo tres artistas leoneses bajo el nombre de Maestro de Palanquinos. Este pintor, junto a su discípulo más aventajado, el Maestro de Astorga, son dos de los artistas leoneses más enigmáticos, cuyas obras, perdidas durante siglos, han empezado a ser habituales en las casas de subastas.

Tablas de estos pintores se han vendido en los últimos años por precios que oscilan entre los 25.000 y los 72.000 euros; también se cerró este año en 73.000 euros la puja de cuatro tablas del Maestro de los Santos Juanes. Hace tres años La Piedad, del Maestro de Palanquinos, con un precio de salida de 27.000 euros alcanzó finalmente los 75.000 (90.750 euros sumando comisión e impuestos).

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