Samuel Rubio quiere que el Cabildo cobre entrada a los conciertos de la Catedral

El Festival de Órgano y el Ciclo Bach permitirán que el costoso órgano construido en Bonn y colocado hace dos años en la Catedral de León no suene sólo en las misas dominicales. Samuel Rubio, director del Fiocle, reconoció ayer que «el órgano pide más», aunque Antonio Moral, responsable del CNDM. aseguró que está en la línea de las grandes catedrales, que ofrecen un gran concierto al mes. Rubio reconoció que, a pesar de que los recitales del festival reciben una media de 2.000 espectadores, muchos «entran y salen a los diez minutos». Algo que, en su opinión, no sucedería si cobraran una entrada simbólica de uno o dos euros. La última palabra la tiene el Cabildo. «Lo estamos discutiendo, pero hay un pequeño rechazo aún», dijo.

Rubio no supo explicar por qué una parte de la entrada que actualmente cobra la Catedral a todas las visitas —5 euros— se destina a financiar un festival que, sin el respaldo del CNDM, no se habría celebrado en las dos últimas ediciones.

El Teatro Emperador, adquirido por el Ministerio de Cultura para ser sede de las Músicas Históricas sigue en el limbo. Moral dijo que no es un asunto de su competencia, ya que el CNDM, creado hace seis años, no tiene sedes propias, sino que todos los conciertos se llevan a cabo en catedrales, teatros y auditorios. «El CNDM heredó las Músicas Históricas y hemos mantenido la llama viva, incrementando nuestra participación cada temporada», añadió Moral.