Balonmano | Liga Europea
Amarga victoria del Ademar
El conjunto leonés se despide de Europa a las primeras de cambio pese a ganar 28-27 al BM Logroño
Un partido del Ademar. DL
No pudo ser. Era muy difícil y aunque el Abanca Ademar rozó la proeza, el BM Logroño será quien dispute la fase de grupos de la Liga Europea de Balonmano (28-27).
Los leoneses necesitaban remontar los 4 goles de desventaja del encuentro de ida en Logroño y llegaron a ponerse con un +4 prometedor en el segundo tiempo, pero entonces Dutra salió a escena acabando con cualquier esperanza.
No resultó sencillo sacarse de encima la presión inicial. Logroño entró mejor en el partido y del 1-2 nada preocupante se pasó al 1-4 en el minuto seis que obligó a Cadenas a pedir tiempo muerto para serenar a los suyos y sobre todo para cortar la sangría visitante. Sin embargo no tuvo frutos a corto plazo porque los riojanos, con un Dutra enchufado, seguían abriendo brecha en el marcador.
Ademar estaba muy parado en ataque, solo Jozinovic acertaba con una zurda envidiable y en menor medida Milos por el otro lateral. Pero los leoneses no se sentían cómodos.
Sólo el paso de los minutos y las rotaciones del de Valdevimbre comenzaron a reconducir a un Ademar al que tampoco le terminaba de ayudar la portería, con un Bomastar flojo. La entrada de Semedo y Boskos dio ese impulso que necesitaba el equipo y para el minuto 15 la balanza ya solo dejaba al Ademar uno abajo (6-7).
Liapis se aplicó en defensa, pero Logroño no se ponía nervioso. Es lo que tiene jugar con el resultado.
Las cosas comenzaron a ajustar en los últimos seis minutos del primer acto. Por primera vez Ademar se creyó que podía. El público enloqueció con el 12-12 logrado por Gonzalo y aún más con el 15-14 de Jaime desde los siete metros en el último suspiro. Una remontada basada en la solidez defensiva, en la entrada de Papan en portería y en la paciencia a la hora de gestionar los ataques posicionales. Quedaban 30 minutos por delante para seguir creciendo sobre la pista.
En el segundo tiempo salió a morder el Ademar, que creía de verdad en la machada. Costó pero el +4 igualaba una eliminatoria que sin embargo nunca estuvo del lado marista. Porque Logroño no se descompuso y Velasco se guardó la bala Dutra para el momento idóneo. Es lo que tiene tener una estrella.
Una lástima porque el Ademar se dejó el alma sobre la pista, poco que reprochar a los jugadores. No habrá más Europa esta temporada, quizá eso ayude a realizar una gran Liga Asobal.