«Barcelona 92 lo cambió todo»

La segunda jornada del Foro Internacional del Deporte Abanca contó ayer con la presencia de Antoni Daimiel, voz de la NBA en España, Pedro Aguado, campeón olímpico y del mundo de waterpolo y presentador del programa Hermano Mayor , y Radomir Antic, uno de los entrenadores de fútbol más importantes de Europa, con pasado en el Real Madrid, el FC Barcelona y el Atlético, con quien ganó el doblete. El periodista Santiago Segurola moderó el debate en el Auditorio, donde hoy se clausura el FID.

Todos dieron su visión sobre los problemas que arrastra el deporte en el siglo XXI y no escondieron, en el caso de Daimiel y Segurola, la mala praxis de la que adolece el periodismo deportivo, que da «más minutos a las rotondas de los campos de entrenamiento que a otros temas más importantes». Segurola subrayó que es «hora de ser sincero» y lamentó que la sociedad mire con recelo al periodismo, «que ha lanzado el rigor por los aires», matizó Daimiel, recién aterrizado de Pekín, donde narró la victoria de España en el Mundial de China. «Muchos colegas de profesión tocan la fibra a la gente, y eso es lo más sencillo. Apenas hay crónicas que cuenten lo que ha sucedido de verdad», denunció.  

En este sentido, Pedro Aguado reclamó a los medios que tengan más «en cuenta» a las disciplinas «minoritarias» y aseguró que si retrocediera en el tiempo volvería a dedicarse al waterpolo, «aunque no lo combinaría con alcohol y drogas», señaló.  

También explicó que hubo un «cambio importante» tras Barcelona 92 por los sacrificios que habían hecho muchos deportistas antes de esa cita olímpica para mejorar sus condiciones de trabajo. «Al principio entrené incluso en piscinas llenas de mierda de otros usuarios», reveló. Aseguró que las instituciones le dijeron por aquel entonces que «solo cuando ganase» se podría ejercitar en unas instalaciones dignas. Abogó igualmente por implantar el modelo de universidades americanas en España, con jugadores becados.  

Por último, Radomir Antic, alejado de los banquillos desde hace tiempo, subrayó que el «deporte es cultura y hay que defenderlo». Del mismo modo, criticó la implantación del VAR porque —justificó— «se ha convertido en el gran protagonista, por encima de los propios futbolistas».