Vídeo | Una década del penalti más recordado en el Bierzo

Hasta hace unos años hablar de un penalti en el entorno de la Deportiva nos retrotraía a un día amargo, aquel en el que una pena máxima que se fue al palo ante el Mallorca Atlético dejaba a la Deportiva sin su primer ascenso a Segunda División B en junio de 1986, cuando la España futbolística miraba a Pique y a su México 86. Incluso aunque no era tan decisivo, el otro penalti más recordado era el que también se fue al poste en las semifinales del play off del 2005 ante la RSD Alcalá, lanzado por uno de los mejores jugadores que ha vestido la camiseta de la Deportiva como es Rubén Vega.

 

Pasaron 24 años casi hasta que otra tanda decisiva en un gran momento salió cara y dio al cuadro berciano un ascenso. Éste no fue a Segunda División B, sino a Segunda División A. Era 23 de mayo del 2010: hoy hace 10 años.

El ascenso del conjunto blanquiazul fue el segundo, pues cuatro años antes con el gol de Fran en Alicante había conseguido el primero, pero sólo duró un curso, igual que pasaría después de este ascenso del 2010.

El deportivismo llegaba eufórico al choque de vuelta de la final de la eliminatoria de campeones tras vencer 0-1 en el partido de ida al Sant Andreu con un tanto de Jónatan Valle. Aunque se reclamó fuera de juego, el cántabro estaba en posición correcta cuando recibió el pase de Víctor Salas.

Aquella calurosísima tarde de primavera El Toralín registró la mayor entrada que ha tenido en casi dos décadas: en torno a 9.500 personas.

Carlos Granero hizo cambios con respecto al partido e ida. Enfrente, en el equipo de Natxo González, Tarradellas, Luso, Lanzarote, Aday, Xavi Moro, Keko o Mayordomo. A la Deportiva le costó mucho y al que después acabaría siendo delantero del cuadro berciano se le anuló un gol legal. Nacho Fernández marcó en propia meta el gol que igualaba la eliminatoria y mandaba el partido a la prórroga. En la misma no hubo variaciones y dio paso a los penaltis. Jónathan Ruiz, Héctor Bueno, Rubén Vega, Miguélez, Víctor Salas, Aday, Jano, Keko, Berodia, Lanzarote, Mandi, Dani Martí, Nacho Fernández, Amarilla, Alcaide, Mayordomo y Candela marcaron en los 17 tiros previos al lanzamiento de Pere Tarradellas, blanquiazul en la temporada 2004-2005. El catalán no pudo llegar al rechace del palo en el comentado tiro de Rubén Vega cinco años antes. Mackay, que había estado a punto de detener varios tiros, se lanzó a su izquierda y detuvo el lanzamiento. Fue una explosión de júbilo inenarrable. Se levantó rápidamente, se quitó la camiseta rosa y negra y corrió. En pocos segundos estaba rodeado por cientos de seguidores. Lo subieron a hombros y lo mantearon, igual que a Granero. Era su segundo ascenso, después del obtenido con el Ciudad de Santiago.

Aquélla no fue la única tanda de penaltis en la que triunfó Mackay. El portero coruñés ya había sido decisivo en el cara o cruz de la primera ronda de la Copa del Rey contra el Eibar a finales de agosto del 2009. Había mantenido la portería siete jornadas seguidas imbatida y se quedó a punto de batir el récord de minutos de la entidad sin encajar, marca que tiene Manolo Rubio. Roberto Losada, del Lugo, lo impidió. Tampoco fue aquélla la mejor parada de Mackay, pero sí la más determinante e importante por lo que suponía y además fue vista por cientos y cientos de deportivistas. Porque en Pontevedra en abril del 2010 realizó una increíble parada ante Ibán Espadas, pero ni el partido era tan decisivo y en las gradas había muchísimos menos seguidores blanquiazules.

«Junto al debut con el RC Deportivo ante el Milán en un Teresa Herrera, es el mejor recuerdo de mi carrera deportiva», ha comentado el gallego en varias ocasiones. Hoy, tras su paso por Sabadell, Atlético Baleares, Boiro, Racing de Ferrol y Real Murcia, ha vuelto al cuadro vallesano para intentar repetir en el play off los éxitos obtenidos con el cuadro santiagués y con el berciano.

De Paula o Jónatan Valle, que llegó en el mercado de invierno, fueron otros destacados futbolistas de aquella temporada en la que debutó Yuri como deportivista, aunque su papel resultó bastante gris. Una década después continúa en la entidad berciana.