El Ejército vacuna hoy a los jugadores de la selección en Las Rozas con Janssen

El culebrón sobre la vacunación de la selección española ha suministrado en pocos días material suficiente para rodar uno de aquellos seriales plagados de conflictos familiares que hacían furor en los años ochenta y noventa del pasado siglo.

Cuando todo parecía listo para que el Ejército acudiese este viernes a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas a administrar el preparado de Pfizer a los integrantes de La Roja, el proceso dio un nuevo bandazo por la demanda de la Federación Española de que se les inoculase la monodosis de Janssen a aquellos convocados por Luis Enrique que no hayan pasado el coronavirus, aunque esa profilaxis no está recomendada para menores de 40 años a causa de unos rarísimos casos de trombos registrados entre la población joven. Pese a ello, el Ministerio de Sanidad dio marcha atrás y se abrió a la demanda federativa, tras solicitar una justificación por escrito que razonase esa excepción.

El organismo que preside Luis Rubiales consideraba que la decisión de suministrar los sueros de Pfizer a los jugadores de La Roja llegaba tarde y temía posibles reacciones adversas.